Comentario

Esdras

Comentario de Esdras

El Regreso del Cautiverio

La Reconstrucción del Templo

Viaje de Esdras a Jerusalén


    Se cree que Esdras mismo haya sido el autor de este libro.

Capítulo 1. La Proclamación de Ciro

    Los últimos dos versículos de 2 Crónicas son iguales a los dos primeros versículos de Esdras, probablemente porque estos dos libros originalmente eran uno solo. El decreto que permitía el regreso de los judíos a Jerusalén fue emitido poco después de haber leído Daniel la escritura en la pared, en la cual se declaraba que Babilonia caería ante Persia, lo cual se cumplió esa misma noche (Dan 5:25-31). Probablemente Daniel haya mostrado a Ciro las profecías que de esta manera se cumplían )Jer 25:11-12; 29:10) y también las de Isaías, que 200 años antes había llamado a Ciro por su nombre y había dicho que por mandato suyo los judíos regresarían y reedificarían a Jerusalén (Isaías 44:26-28; 45:1, 13). No es extraño que Ciro tuviese en alta estima al Dios de los judíos (v. 3). "Sesbasar," v. 8 es probablemente el nombre babilónico de Zorobabel (3:2) 

Capítulo 2. Registro de los que Regresaron

    Eran 42.360, además de los siervos (vs. 64, 65). La suma de los números parciales da unos 11.000 menos que el total. Se cree que esta diferencia representa a exiliados de otras tribus fuera de Judá. En 1 Crónicas 9:3 se nombra a Efraín y Manasés. En Esdras 10:25 se habla de "Israel," y en 2:70; 6:17-22 y 8:35 el conjunto de los regresados se llama "todo Israel." Se ofrendaron 12 becerros y 12 machos cabríos "por todo Israel." Esto parece indicar que los exiliados de Judá, al subir en su viaje de regreso el valle de Eufrates y atravesar la región a la cual habían sido desterrados los exiliados del reino norteño, recogieron a algunos que quisieron regresar con ellos. Esto no ayuda a comprender cómo, en los tiempos novotestamentarios, los judíos todavía se llamaban "las doce tribus" (Luc 22:30; Hech 26:7; Sant 1:1).

Capítulo 3. Colocación de los Cimientos del Templo

    En el mes séptimo del primer año de su regreso, construyeron el altar, y guardaron la fiesta de Tabernáculos en gratitud gozosa hacia Dios. Al segundo mes del año siguiente, cuando se echaron los cimientos del Templo, hicieron resonar los cielos con sus alegres hosanas. Pero los más viejos, que habían visto el primer Templo, lloraban, tan insignificante era esté comparado con aquél. "Jesúa" (v.2) llamado "Josué" en Hageo 1:1, era hijo del sacerdote Josadec que había sido llevado a Babilonia (1 Crón 6:15). "Zorobabel" (2) era gobernador, Hageo 1:1. Era nieto del rey Joaquín que había sido llevado a Babilonia (1 Crón 3:17-19). Sí aquello hubiese sido reino, éste habría sido el rey; con refinada cortesía,  Ciro le nombró gobernador de Judá.

Capítulo 4. Suspensión de la Obra

    Cuando ya progresaba la obra del templo y del muro de Jerusalén, los pueblos a quienes se había dado la tierra de los judíos, y sus vecinos, comenzaron a oponerse; y mediante amenazas e intrigas lograron detener la obra 15 años, hasta el reino de Darío. Se cree que "Asuero" en v. 6 y "Artajerjes" en v. 7 hayan sido nombres de Cambises, que reinó entre Ciro y Darío.

Capítulos 5, 6. Terminación del Templo

    Darío se mostró amigo de los judíos; en su segundo año, 520 a.C., 16 años después del regreso de los exiliados con el estímulo de los profetas Hageo y Zacarías la obra fue recomenzada. Poco después vino el decreto de Darío autorizando la terminación del Templo, y una orden para que pudiera girar contra el tesoro real para los fondos necesarios. Dentro de 4 años, 520-516 A.C., quedó terminado y fue consagrado en medio de gran regocijo.  

    La célebre inscripción de Behistún que dio la clave del antiguo idioma babilónico  fue hecho por el mismo Darío y en el mismo año en que se terminó el templo.

    Por alguna razón, luego de acabado el Templo no progresó más la obra de reedificar la ciudad durante unos 70 años.

Capítulos 7, 8. Viaje de Esdras a Jerusalén

    Esto fue en el 547 A.C., en el reino de Artajerjes hijastro de la  reina Ester, unos 60 años después el Templo y 80 después del regreso de los primeros judíos a Jerusalén. Esdras era sacerdote. Fue para enseñar en Judá la ley de Dios, para embellecer el Templo y para restablecer los servicios del mismo. 

Capítulos 9, 10. Matrimonios mixtos

    Cuando Esdras llegó a Jerusalén, halló un estado de cosas que le apesadumbró grandemente. El pueblo, los sacerdotes, levitas, príncipes y gobernadores se habían casado libremente con sus vecinos idólatras; cosa que Dios había prohibido repetidamente, que había inducido a los judíos a la idolatría, y que había sido la causa de su cautiverio. Dios había enviado profetas tras profeta, y juicio tras juicio, y por fin había recurrido al cautiverio y a la casi extinción de la nación. Ahora un pequeño remanente había vuelto, curado; y lo primero que hacía era volver a las andanzas antiguas de los matrimonios con pueblos idólatras. Pueden parecernos severas las medidas de Esdras para deshacerse de las esposas idólatras, pero fueron efectivas. Los judíos, que hasta el cautiverio babilónico persistían en la idolatría fueron librados de ella; y en términos generales, desde esa fecha hasta el presente, han permanecido libres de ella. 

    Esdras ayudó en otras reformas, tal como consta en el libro de Nehemías. La tradición le hace el fundador del culto de las sinagogas, y presidente de la "Gran Sinagoga" que según se dice, completó la formación del cánon del Antiguo Testamento.