Personas clave

1 Samuel

Personas clave de 1 Samuel

ANA

    La oración de Ana nos muestra que todo lo que tenemos y recibimos es un préstamo de Dios. Ana pudo haber tenido muchas razones para ser una madre posesiva. Pero cuando Dios contestó su oración, ella cumplió su promesa de dedicar a Samuel al servicio de Él. 

    Ella descubrió que el gozo más grande en tener un hijo es regresárselo total y libremente a Dios. Ella entró en la maternidad preparada para hacer lo que todas las madres deberán hacer a la larga: dejar ir a sus hijos. 

    Cuando los niños nacen, son completamente dependientes de sus padres para todas sus necesidades básicas. Esto hace que algunos padres se olviden que esos mismos niños crecerán hacia la independencia dentro de unos pocos años. Estar consciente de las diferentes etapas de este saludable proceso fortalecerá en gran manera las relaciones familiares; resistirse a o negar este proceso ocasionará gran dolor. Gradualmente debemos dejar ir a nuestros hijos para poder permitirles que lleguen a ser adultos maduros e interdependientes. 

Puntos fuertes y logros: 

• Madre de Samuel, el más grande juez de Israel 

• Ferviente creyente; eficaz en la oración 

• Dispuesta a cumplir un muy costoso compromiso 

Debilidades y errores: 

• Luchó con su autoestima porque no podía tener hijos 

Lecciones de su vida: 

• Dios escucha y contesta las oraciones 

• Nuestros hijos son regalos de Dios 

• Dios está preocupado por el oprimido y el afligido 

Datos generales: 

• Dónde: Efraín 

• Ocupación: Ama de casa 

• Familiares: Esposo: Elcana. Hijo: Samuel. Más tarde, otros tres hijos y dos hijas 

• Contemporáneos: Elí, el sacerdote 

Versículos clave: 

«Y ella dijo: ¡Oh, señor mío! Vive tu alma, señor mío, yo soy aquella mujer que estuvo aquí junto a ti orando a Jehová. Por este niño oraba, y Jehová me dio lo que le pedí. Yo, Pues, lo dedico también a Jehová; todos los días que viva, será de Jehová. Y adoró allí a Jehová» (1 Samuel 1:26-28). 

Su historia se relata en 1 Samuel 1-2. 

ELÍ

    Elí era una persona del Antiguo Testamento con un problema muy moderno. El reconocimiento privados. Pudo haber sido un excelente sacerdote, pero fue un padre deficiente. Sus hijos le trajeron aflicción y ruina. Carecía de dos importantes cualidades necesarias para disciplinar a los hijos de una manera efectiva: firme determinación y acción correctiva. 

    Elí respondía a las situaciones en vez de resolverlas. Pero aun sus respuestas tendían a ser débiles. Dios señaló los errores de sus hijos, pero Elí hizo muy poco para corregidos. Es claro el contraste que existe en la manera en la que Dios trató con Elí y en la que Elí trató con sus hijos. Dios dio una advertencia, señaló en detalle las consecuencias de la desobediencia y luego actuó. Elí sólo advirtió. Los hijos necesitan saber que las palabras y las acciones de sus padres van juntas. Tanto el amor como la disciplina deben ser dichas tanto como llevadas a la práctica. 

    Pero Elí tenía otro problema: estaba más preocupado con los símbolos de su religión que con el Dios que representaban. Para El, el arca del Pacto se había convertido en una reliquia que debía ser protegida y no en un recordatorio de su Protector. Su fe pasó de apuntar al Creador para apuntar a lo creado. 

    Puede ser más fácil adorar las cosas que podemos ver. ya sean edificios. personas. o las mismas Escrituras, pero estas cosas tangibles no tienen poder por sí mismas. El libro que está leyendo es o una mera reliquia religiosa respetable, o es la aguda y efectiva Palabra de Dios. Su actitud hacia ella se forma en gran manera por medio de la relación que tiene con el Dios de quien ella proviene. Una reliquia o una antigüedad tiene que estar muy bien guardada. La Palabra de Dios tiene que ser usada y obedecida. ¿Cuál actitud describe con exactitud su enfoque de la Palabra de Dios? 

Puntos fuertes y logros: 

• Juzgó a Israel durante cuarenta años 

• Habló con Ana. la madre de Samuel, y le aseguró la bendición de Dios 

• Educó y entrenó a Samuel, el más grande juez de Israel 

Debilidades y errores: 

• No supo disciplinar a sus hijos o corregirlos cuando pecaron 

• Tenía la tendencia de reaccionar ante las situaciones pero no tomaba una acción decisiva 

• Vio el arca del pacto como una reliquia para ser atesorada, en vez de verla como un símbolo de la presencia de Dios en Israel 

Lecciones de su vida: 

• Los padres necesitan ser responsables de la disciplina de sus hijos 

• La vida es algo más que un simple reaccionar, demanda acción 

• Las victorias pasadas no pueden sustituir la verdad presente 

Datos generales: 

• Dónde: Silo • Ocupaciones: Sumo sacerdote y juez de Israel 

• Familiares: Hijos: Ofni y Finees 

• Contemporáneos: Samuel 

Versículos clave: 

«Y Jehová dijo a Samuel: He aquí haré un cosa en Israel, que a quien la oyere, le retiñirán ambos oídos. Aquel día yo cumpliré contra Elí todas las cosas que he dicho sobre su casa, desde el principio hasta el fin. Y le mostraré que yo juzgaré su casa para siempre, por la iniquidad que él sabe: porque sus hijos han blasfemado a Dios, y él no los ha estorbado. Por tanto, yo he jurado a la casa de Elí que la iniquidad de la casa de Elí no será expiada jamás, ni con sacrificios ni con ofrendas» (1 Samuel 3:11-14). 

Su historia se relata en 1 Samuel 1-4. También se menciona en 1 Reyes 2:26,27. 

 

SAMUEL

    A menudo nos preguntamos cómo habrá sido la infancia de los grandes de la historia. Tenemos muy poca información acerca de los primeros años de la mayoría de las personas mencionadas en la Biblia. Samuel es una grata excepción. Él vino como resultado de la respuesta de Dios a la ferviente oración de Ana por un hijo. (El nombre Samuel viene de la expresión hebrea, «pedido a Dios».) Dios moldeó a Samuel desde el principio. Como Moisés, Samuel fue llamado para desempeñar diferentes roles: juez, sacerdote, profeta, consejero y hombre de Dios en un momento crucial en la historia de Israel. Dios actuó a través de Samuel porque este estaba dispuesto a ser lo que Dios quería que fuera: su siervo. 

    Samuel demostró que aquellos a quienes Dios encuentra fieles en las cosas pequeñas se les confiarán cosas grandes. Creció ayudando al sumo sacerdote (Elí) en el tabernáculo, hasta que Dios le encomendó otras responsabilidades. Dios pudo utilizar a Samuel porque él estaba genuinamente dedicado a Él. 

    Samuel avanzó porque estaba escuchando las instrucciones de Dios. Demasiado a menudo pedimos a Dios que controle nuestras vidas sin que renunciemos a las metas que nos hemos fijado. Pedimos a Dios que nos ayude a llegar a donde nosotros queremos. El primer paso que tenemos que dar para corregir esta tendencia es entregarle tanto el control como el destino de nuestras vidas. El segundo paso es ser obediente a lo que ya sabemos que Él requiere de nosotros. El tercer paso es escuchar todas las instrucciones que provenga de su Palabra, el mapa de Dios para la vida. 

Puntos fuertes y logros: 

• Utilizado por Dios para ayudar a Israel en su transición de un pueblo tribal gobernado libremente a una monarquía 

• Ungió a los dos primeros reyes de Israel 

• Fue el último y el más efectivo de los jueces de Israel 

• Se lo menciona en el Salón de la Fe en Hebreos 11 

Debilidades y errores: 

• Fue incapaz de guiar a sus hijos a una relación estrecha con Dios. 

Lecciones de su vida: 

• La importancia de lo que la gente logra está directamente relacionado con su relación con Dios 

• La clase de personas que somos es más importante que cualquier cosa que podamos hacer 

Datos generales: 

• Dónde: Efraín 

• Ocupaciones: Juez, profeta, sacerdote 

• Familiares: Madre: Ana. Padre: Elcana. Hijos: Joel y Abías 

• Contemporáneos: Elí, Saúl, David 

Versículos clave: 

«Y Samuel creció, y Jehová estaba con él, y no dejó caer a tierra ninguna de sus palabras. Y todo Israel, desde Dan hasta Beerseba, conoció que Samuel era fiel profeta de Jehová» (1 Samuel 3:19, 20). 

Su historia se relata en 1 Samuel 1-28. También se lo menciona en Salmos 99.6; Jeremías 15:1; Hechos 3:24; 13:20; Hebreos 11:32. 

SAÚL

    Las primeras impresiones pueden ser engañosas. especialmente cuando la imagen creada por la apariencia de una persona se contradice con sus cualidades y habilidades. Saúl era la imagen visual ideal de un rey. pero las tendencias de su carácter a menudo eran contrarias a las ordenes de Dios para un rey. Saúl fue el líder escogido de Dios, pero esto no significaba que fuera capaz de ser rey por sí solo. 

    Durante su reinado, y cuando obedeció a Dios. Saúl tuvo grandes éxitos. Sus grandes fracasos surgieron cuando actuó por su propia cuenta. Saúl tenía la materia prima para ser un buen líder: apariencia, valor y acción. Incluso sus debilidades pudieron haber sido utilizadas por Dios si Saúl las hubiera reconocido y puesto en las manos de Dios. Sus propias decisiones lo separaron de Dios y a la larga lo separaron hasta de su propio pueblo. 

    De Saúl podemos aprender que mientras nuestros puntos fuertes y habilidades nos hacen útiles, es nuestra debilidad la que nos hace utilizables. Nuestras habilidades y talentos nos hacen ser herramientas. pero nuestros fracasos y reveses nos recuerdan que necesitamos a un artesano que controle nuestras vidas. Cualquier cosa que logremos por nuestra cuenta es sólo un indicio de lo que Dios podría hacer por medio de nuestras vidas. ¿Controla Él su vida? 

Puntos fuertes y logros: 

• Primer rey de Israel designado por Dios 

• Conocido por su valor personal y su generosidad 

• Alto, su buena apariencia impresionaba 

Debilidades y errores: 

• Sus habilidades de líder no eran congruentes con las expectativas creadas por su apariencia 

• Impulsivo por naturaleza, tendía a sobrepasar sus límites 

• Celoso de David, trató de matarlo 

• Específicamente desobedeció a Dios en diversas ocasiones 

Lecciones de su vida: 

• Dios quiere la obediencia que sale del corazón, no meros actos de un ritual religioso 

• La obediencia siempre significa sacrificio, pero el sacrificio no siempre es obediencia 

• Dios quiere utilizar nuestras fuerzas y nuestras debilidades 

• La debilidad nos debe ayudar a recordar nuestra necesidad de la guía y ayuda de Dios 

Datos generales: 

• Donde: La tierra de Benjamín 

• Ocupación: Rey de Israel 

• Familiares: Padre: Cis. Hijos: Jonatán, Is-boset. Esposa: Ahinoam 

Versículos clave: 

"Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas. como en que se obedezca a las palabras de Dios? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios. y el prestar atención que la grosura de los carneros. Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación. Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová. El también te ha rechazado para que no seas rey" (1 Samuel 15.22. 23). 

Su historia se relata en 1 Samuel 9-31. También se lo menciona en Hechos 13.21. 

DAVID

    Cuando pensamos en David, pensamos: pastor, poeta, matador de gigantes, rey, antepasado de Jesús. En resumen, uno de los hombres más grandes del Antiguo Testamento. Pero junto con esta lista está otra: traidor, mentiroso, adúltero, asesino. La primera lista de las cualidades que quizá todos queremos tener; la segunda, la que quizá todos podemos llegar a tener. La Biblia no se esfuerza en esconder los fracasos de David. Sin embargo, se le recuerda y respeta por su sentimientos hacia Dios. Al saber que nos parecemos más a David en sus errores que en su grandeza, debemos tener la curiosidad de descubrir qué fue lo que hizo que Dios se refiriera a David como un hombre «conforme a mi corazón» (Hechos 13:22). 

    David, más que nada, tenía una fe inalterable en la naturaleza fiel y misericordiosa de Dios. Fue un hombre que vivió con gran placer. Pecó muchas veces, pero era rápido para confesar sus pecados. Sus confesiones provenían del corazón y su arrepentimiento era genuino. David nunca tomó a la ligera el perdón de Dios ni dio por hechas sus bendiciones. Por ello, Dios nunca dejó de darle ni su perdón ni las consecuencias de sus actos. David experimentó el gozo del perdón aun cuando tuvo que sufrir las consecuencias de sus pecados. 

    Tenemos la tendencia a invertir estas dos cosas. Muy a menudo, preferiríamos evitar las consecuencias a experimentar el perdón. La gran diferencia que hay entre David y nosotros es que él pecó en gran manera, pero no pecó repetidamente. Aprendió de sus errores porque aceptó el sufrimiento que traían consigo. Por lo general parece que no aprendemos de nuestros errores o de las consecuencias que resultan de los mismos. ¿Qué cambios necesita hacer para que Dios encuentre esa clase de obediencia en usted? 

Puntos fuertes y logros: 

• El más grande rey de Israel 

• Antepasado de Jesús 

• Nombrado en la Galería de la Fe de Hebreos 11 

• Dios mismo lo describió como un hombre conforme a su corazón (1 Samuel 13.14). 

Debilidades y errores: 

• Cometió adulterio con Betsabé 

• Urdió el asesinato de Urías, esposo de Betsabé 

• Desobedeció directamente a Dios al tomar un censo del pueblo 

• No lidió bien con el pecado de sus hijos 

Lecciones de su vida: 

• La disposición de reconocer nuestros errores con sinceridad es el primer paso para enfrentarlos 

• El perdón no elimina las consecuencias del pecado 

• Dios desea en gran manera nuestra confianza y nuestra adoración completas 

Datos generales: 

• Dónde: Belén, Jerusalén 

• Ocupaciones: Pastor, músico, poeta, soldado, rey 

• Familiares: Padre: lsaí. Esposas mencionadas: Mical, Ahinoam, Betsabé, Abigail. Hijos mencionados: Absalón, Amnón. Salomón, Adonías. Hija mencionada: Tamar. Siete hermanos 

• Contemporáneos: Saúl, Jonatán, Samuel, Natán 

Versículos clave: 

«Ahora pues, Jehová Dios, tú eres Dios, y tus palabras son verdad, y tú has prometido este bien a tu siervo. Ten ahora a bien bendecir la casa de tu siervo, para que permanezca perpetuamente delante de ti, porque tú, Jehová Dios, lo has dicho, y con tu bendición será bendita la casa de tu siervo para siempre» (2 Samuel 7:28,29). 

Su historia se relata en 1 Samuel 16-1 Reyes 2. Además se le menciona en Amós 6:5; 1:1,6; 22:43-45; Lucas 1:32; Hechos 13:22; Romanos 1:3; Hebreos 11:32. 

JONATÁN

    La lealtad es una de las cualidades más costosas de la vida; es la parte más abnegada del amor. Para ser leal, usted no puede vivir sólo para sí mismo. La gente leal no sólo se aferra a sus compromisos: está dispuesta a sufrir por ellos. Jonatán es un brillante ejemplo de lealtad. Algunas veces se vio forzado a luchar con un conflicto de lealtades: hacia su padre Saúl o hacia su amigo David. La solución que dio a ese conflicto nos enseña cómo ser leales y qué debe ser guía de la lealtad. En Jonatán, la lealtad siempre se guió por la verdad. 

    Jonatán se dio cuenta de que la fuente de la verdad era el Dios que demandaba su lealtad suprema. Fue su relación con Dios la que dio a Jonatán la habilidad de manejar efectivamente las situaciones complicadas de su vida. Fue leal a Saúl porque era su padre y porque era el rey. Fue leal con David porque era su amigo. Su lealtad hacia Dios lo guió a través de las demandas conflictivas' de sus relaciones humanas. 

    Las demandas conflictivas de nuestras relaciones pueden ser grandes retos también para nosotros. Si tratamos de resolver estos conflictos solamente a nivel humano, estaremos siempre sintiéndonos traidores. Pero si comunicamos a nuestros amigos que nuestra lealtad suprema es hacia Dios y su verdad, muchas de nuestras decisiones serán mucho más claras. La verdad en su Palabra, la Biblia, traerá luz a nuestras decisiones. ¿Saben las personas que están más cerca de usted para quién es su mayor lealtad? 

Puntos fuertes y logros: 

• Valiente, leal, líder nato 

• El amigo más íntimo que tuvo David 

• Nunca interpuso su bienestar personal delante de aquellos que amaba 

• Dependió de Dios 

Lecciones de su vida: 

• La lealtad es uno de las facetas más fuertes del valor 

• Una lealtad hacia Dios pone todas las otras relaciones en perspectiva 

• Las grandes amistades son costosas 

Datos generales: 

• Ocupación: Líder militar 

• Familiares: Padre: Saúl. Madre: Ahinoam. Hermanos: Abinadab y Malquisúa. Hermanas: Merab y Mical. Hijo: Mefi-boset 

Versículo clave: 

«Angustia tengo por ti, hermano mío Jonatán, que me fuiste muy dulce. Más maravilloso me fue tu amor que el amor a las mujeres» (2 Samuel 1.26). 

Su historia se relata en 1 Samuel 13-31. También se le menciona en 2 Samuel 9. 

ABIGAIL

    Algunos hombres no se merecen a sus esposas. Abigail fue quizás la mejor mujer que Nabal pudo alguna vez tener y obtuvo más de lo que negoció cuando hizo los arreglos para casarse con ella. Abigail era hermosa y más capaz que él para manejar su riqueza. Pero Nabal no tomaba en cuenta a su esposa. 

    A pesar de sus reveses, la familia de Nabal hizo lo que pudo para mantenerlo lejos de los problemas. Esta lealtad debió haberla inspirado Abigail. Si bien su cultura y su esposo la consideraban de poco valor, ella utilizó la mayor parte de sus habilidades y oportunidades. A David le impresionó sus habilidades. Y cuando Nabal murió, se casó con ella. 

    Abigail fue una excelente consejera para los dos hombres de su vida, trabajó muy duro para evitar que hicieron cosas sin pensar. Por sus acciones rápidas y negociaciones astutas, evitó que David se vengara de Nabal. Tuvo la visión del panorama completo y permitió la gran intervención de Dios. 

    ¿Ve usted, al igual que Abigail, más allá de la presente crisis? ¿Observa, como ella, el cuadro completo? ¿Utiliza sus habilidades para promover la paz? ¿Es leal sin por ello ser ciego? ¿Qué reto o responsabilidad enfrenta hoy que necesite una persona bajo el control de Dios? 

Puntos fuertes y logros: 

• Sensible y capaz 

• Oradora persuasiva, capaz de ver más allá de sí misma 

Lecciones de su vida: 

• Las situaciones difíciles de la vida hacen surgir lo mejor de las personas 

• Uno no necesita un título famoso para desarrollar un papel significativo 

Datos generales: 

• Dónde: Carmelo 

• Ocupación: Ama de casa 

• Familiares: Primer esposo: Nabal. Segundo esposo: David. Hijo: Quileab (Daniel) 

• Contemporáneos: Saúl, MicaL, Ahinoam 

Versículos clave: 

«Y dijo David a Abigail: Bendito sea Jehová Dios de Israel que te envió para que hoy me encontrases. Y bendito sea tu razonamiento, y bendita tú, que me has estorbado de ir a derramar sangre, y a vengarme por mi propia mano» (1 Samuel 25.32,33). 

Su historia se relata en 1 Samuel 25-2 Samuel 2. También se menciona en 1 Crónicas 3.1.