Arqueología

1 Corintios

Arqueológia de 1 Corintios

LA VERACIDAD DE LA BIBLIA

1 Corintios 7. “La carta “Perdida” de los Corintios a Pablo.”

Antes de redactar 1 Corintios, Pablo recibió información acerca de la iglesia corintia. Él mencionó informes personales «de la familia de Cloé» (1Co 1:11) y habló de una carta de los corintios que Estéfanas, Fortunato y Acaico probablemente habían entregado (7:1). Aparentemente, no existe ninguna copia de esta carta extraviada, sin embargo, probablemente incluía preguntas acerca del matrimonio, alimentos sacrificados a los ídolos, adoración, resurrección, colecta de Pablo para ayudar a Jerusalén, y Apolos. Pablo respondió las preguntas de los creyentes corintios acerca de cada uno de estos asuntos, utilizando las frases «Paso ahora ...» o «En cuanto a ...» cuando comenzaba un nuevo tema (v. 1; 8:1; 12:1; 16:1,12). En ciertos casos, no está claro si Pablo estaba citando las propias declaraciones de los corintios para corregirlos (7:1b; 8:1b) o si estas frases reflejaban su propia enseñanza.

Como un apóstol responsable de la propagación de las iglesias a lo largo del imperio romano, Pablo sin duda mantuvo correspondencia dinámica con aquellas iglesias a lo largo de su ministerio. Cuando reconocemos que sus cartas no fueron escritas como tratados abstractos teológicos, sino que por lo general como respuestas a problemas específicos dentro del contexto de situaciones específicas de las iglesias, podemos comprender mejor las enseñanzas que contienen estas cartas. No tiene sentido especular acerca de la posible importancia de encontrar una de las cartas extraviadas de Pablo. Las probabilidades de que esto suceda son mínimas, y el canon del Nuevo Testamento, en todo caso, está cerrado.

NOTAS CULTURALES E HISTÓRICAS

1 Corintios 8. “Templos restaurantes y comida sacrificada a ídolos”

En muchas culturas antiguas, las personas de forma rutinaria sacrificaban animales a sus dioses y luego comían su carne. En el mundo greco-romano, los templos tendrían casi siempre comedores en los que grupos de personas podían festejar juntas. El templo de Asclepio en Corinto, por ejemplo, tenía tres comedores, cada uno con espacio para 11 invitados en sofás colocados junto a las paredes. No está claro si estos comedores particulares se usaban durante los tiempos de Pablo, sin embargo, algunas adaptaciones parecen haber estado tras el discurso de Pablo en 1 Corintios 8-10. Corinto tan  bien incluía un templo para la diosa Deméter y su hija Perséfone, así como santuarios relacionados con dioses egipcios y emperadores romanos. Aunque las comidas en estos santuarios con frecuencia eran más momentos sociales que ceremonias religiosas, nadie podría negar que existía en ellas un elemento religioso. La presencia de un cristiano en una comida relacionada con semejante contexto pagano era repugnante para Pablo.

El exceso de carne de los templos pudo haber sido llevado al mercado. Si esa carne, la cual podía o no estar asociada con la adoración a ídolos, fuera presentada a un creyente en la casa de alguien más, Pablo permitía que el cristiano la comiera. Sin embargo, si el anfitrión declaraba abiertamente que la carne había venido de un santuario pagano, el creyente debía de abstenerse por el bien de los hermanos «débiles», cuyas conciencias podían estar aún sensibles a las prácticas idólatras.

NOTAS CULTURALES E HISTÓRICAS

1 Corintios 11. “Fiestas de amor”

Reunirse a compartir los alimentos era una parte muy importante en la vida de la iglesia primitiva. Jesús puso un ejemplo al acoger al compañerismo de la mesa a todo el que llegara. La iglesia primitiva continuó con esta práctica y los miembros con frecuencia se reunían en las casas de la gente para compartir los alimentos (p.ej., Hch 2:42). Algunas asociaciones religiones judías y greco-romanas también se reunían para comidas comunitarias, y a veces la conducta en las comidas comunitarias paganas podía ser en extremo escandalosa. Sin embargo, para los cristianos el compartidos alimentos era un emblema tan poderoso de su amor en Cristo que esta actividad se llamó «fiesta de amor)) (de griego agape; lit., «un amor,). La palabra se usa de esta manera en el Nuevo Testamento solamente en Judas 12.

Jesús también instituyó la Eucaristía (o «Cena del Señor») y es difícil establecer la relación entre la Eucaristía y la «fiesta de amor». ¿Eran un mismo o dos diferentes acontecimientos? La respuesta más probable es que en la iglesia primitiva no hacía ninguna distinción marcada entre ambas. La Eucaristía se celebraba probablemente en el contexto de una comida de iglesia, justo como se conmemoró la primera Eucaristía en el contexto de una cena de Pascua. Sin embargo, pronto se hizo evidente que no era sabio combinar las dos (1Co 11:20-21): «cuando se reúnen, ya no es para comer la Cena del Señor, porque cada uno se adelanta a comer su propia cena, de manera que unos se quedan con hambre mientras otros se emborrachan». En los siglos posteriores, la Cena del Señor se separó de la comida común, y la tradición de la «fiesta de amor» comenzó a desaparecer.

NOTAS CULTURALES E HISTÓRICAS

1 Corintios 12. “Hablar en lenguas en la adoración cristiana y pagana”

El hablar en lenguas se reconoció como parte de la vida de la iglesia primitiva. En Hechos 2, las lenguas se identifican como idiomas extranjeros que eran entendidos por la diversidad de peregrinos en Jerusalén. En 1 Corintios, sin embargo, no está claro si las lenguas eran idiomas extranjeros olvidados, lenguajes angelicales o gemidos inarticulados «que no pueden expresarse con palabras» (Ro 8:26). Cualquiera que haya sido el caso, Pablo deseó que las lenguas se tradujeran de manera que se pudieran beneficiar todos los presentes.

Algunos sostienen que en el mundo antiguo existían paralelos a hablar en lenguas, no obstante estas supuestas correspondencias pueden ser erróneas. Es cierto que otras culturas conocían de varios tipos de lenguaje extático, el cual algunas veces podía incluir ya fuera un lenguaje ininteligible o palabras y frases extranjeras. Algunos ritos paganos (con la ayuda del alcohol o drogas) actuaban en la gente hasta llevarla a un estado de delirio. En los oráculos paganos, las sacerdotisas extáticas a veces entregaban mensajes que pretendían eran de los dioses. El pueblo describiría estas sacerdotisas como «locas», pero eso generalmente se refería al hecho de que su significado era oscuro. Un oráculo pagano podía haber sido entregado en griego cotidiano, pero su significado podía aún haber sido misterioso o confuso, incluso para una audiencia de habla griega. Las palabras eran inteligibles, pero su mensaje era oscuro.

Un ejemplo famoso concierne a la leyenda de Creso, rey de Lidia, quien buscó el consejo del oráculo de Delfos en cuanto a si debía o no hacer la guerra contra Persia. A él se le dijo que si lo hacía, caería un gran reino. Creso atacó, al creer que el oráculo indicaba su propia victoria, sin embargo, fue derrotado y su propio reino cayó. Por lo tanto, aunque la sacerdotisa en Delfos hubiese hablado de una manera extática, el verdadero problema era la ambigüedad de su mensaje.

Esta forma de lenguaje extático debe distinguirse de la práctica cristiana, en la cual la lengua desconocida evidentemente debía ser traducida a un lenguaje inteligible por la congregación. Por supuesto, el uso desenfrenado de las lenguas en la adoración puede a veces parecerse a los soliloquios de los adoradores paganos. Esto puede haber sido expresado, dada la preocupación de Pablo, en 1 Corintios 14:23, donde señaló que un incrédulo podía entrar a la iglesia y escuchar lenguas sin interpretación y «decir que ustedes están locos».

NOTAS CULTURALES E HISTÓRICAS


1 Corintios 14. “El papel de la mujer en la vida religiosa del mundo greco-romano”

Las actividades religiosas de las mujeres en el mundo greco-romano abarcaban un amplia gama y exhibían una enorme diversidad. Algunos cultos de misterio incluían una adoración extática y orgiástica en donde las mujeres jugaban un papel prominente, y las sacerdotisas eran algo normal en la adoración de diosas griegas. Algunas fiestas religiosas en Grecia eran exclusivamente para mujeres; un ejemplo son las Tesmoforias, que honraban a la diosa Deméter. Las Bacantes, un drama del poeta griego Eurípides (siglo V a.C.), cuenta acerca de celebraciones religiosas frenéticas al dios Dioniso por parte de las mujeres que seguían su culto. Otras religiones paganas crearon espacio para expresiones sexuales importantes durante las fiestas religiosas, y los cultos a la fertilidad emplearon mujeres con el propósito de llevar a cabo la prostitución ritual o sagrada. Por otra parte, dentro del judaísmo se restringía el acceso de las mujeres a los patios interiores del templo de Jerusalén, y los eruditos debaten si las sinagogas de la época presentaban segregación de sexo.

En 1 Corintios 14, Pablo dio pautas para la adoración ordenada, incluyendo algunas instrucciones específicas dirigidas a las actividades de las mujeres en la adoración (vv. 33-55). Evidencia de Corinto revela que la ciudad contenía varios templos a Afrodita y Apolo, y los lectores de Pablo debían de estar familiarizados con estos y otros cultos que se extendieron en el mundo greco-romano.

NOTAS CULTURALES E HISTÓRICAS

1 Corintios 15. “Bautizo de los muertos”

Numerosas propuestas han sido ofrecidas como significado de «bautizarse por los muertos» en 1 Corintios 15:29. Cada teoría tiene algunos problemas, sin embargo, algunos son más convincentes que otros:

(Biblia de Estudio Arqueológica. Vida. p. 1909)