Sofonías
Sofonías
צפזיה
"Dios cobija a su pueblo"
Sofonías en varias versiones:
Tiempo de Lectura= 0:10 /Contiene: 3 capítulos, 53 versículos y 1.617 palabras.
MÉTODO CRÍTICO
1) ¿QUIÉN ESCRIBIÓ EL LIBRO? Sofonías
2) ¿CUÁNDO FUE ESCRITO? 640 a 610 a.C.
3) ¿A QUIÉN FUE ESCRITO? Judá / Naciones
4) ¿DE DÓNDE FUE ESCRITO? Judá
MÉTODO HISTÓRICO
1) ¿CUÁL ES EL TRASFONDO HISTÓRICO DEL LIBRO? Sofonías vivió en el tiempo de Jeremías, Habacuc y Nahum. Así como esos profetas, él habla en contra de los pecados del pueblo. Él profetiza el juicio sobre Judá y las naciones vecinas así como también las bendiciones sobre la Jerusalén restaurada.
Sofonías profetizó en los días de Josías (1:1). Era tataranieto de Ezequías (1:1), y por lo tanto de sangre real y pariente de Josías. Este, en 639-608 a.C. y después del reinado largo y malo de Manasés, hizo grandes reformas (2 Crónicas 34) en las cuales Sofonías tuvo parte prominente. Así pues, esta profecía se dio muy pocos años antes de sellarse la suerte de Judá.
MÉTODO LITERARIO
1) ¿QUÉ GÉNERO DE LITERATURA ES EL LIBRO? Profético / Histórico.
MÉTODO PANORÁMICO
1) ¿CUÁL ES LA IDEA PRINCIPAL DEL LIBRO? Anunciar Juicios proféticos inminentes, para los días de Sofonías, y para el futuro, el día del Señor, junto con la misericordia de Dios, cuando salieron de Babilonia.
2) ¿CUÁL FUE LA RAZÓN PRINCIPAL POR LA CUAL SE ESCRIBIÓ ESTE LIBRO? Estremecer al pueblo de Judá a fin de que abandone su indiferencia e instarlo a volver a Dios.
PALABRAS CLAVE DE SOFONÍAS (RV 1960): el día de Jehová (el día, en aquel día), remanente (restos)
ÉNFASIS: El futuro día de Jehová; juicio contra Judá por sus pecados; Jehová como Dios de todas las naciones; juicios contra las naciones; salvación final de un remanente de Judá.
CÓMO LEER SOFONÍAS
Cuando la justicia se distorsiona, la línea que separa el bien y el mal se difumina, y las autoridades se corrompen, es fácil desanimarse. Cuando caen los líderes religiosos, el desánimo puede volverse cinismo. Sofonías nos garantiza que aunque aquellos que supuestamente debieran ser ejemplos de bien nos decepcionen y hagan lo equivocado, Dios sigue siendo digno de confianza. Él dice: «Sus profetas son mentirosos y arrogantes, en busca de su propia ganancia. Sus sacerdotes profanan el templo al desobedecer las instrucciones de Dios. Pero el Señor todavía está en la ciudad, y él no hace nada malo.» (Zep 3:4-5).
Sofonías es muy franco al describir una escena de miseria y desolación, él utiliza poesía y un lenguaje cargado de emociones para ilustrar tanto el juicio como la salvación de Dios, su corrección y compasión. Esta palabra tan oportuna nos da órdenes a seguir en momentos oscuros: hemos de alumbrar fuertemente para llevar la luz del Señor hacia la oscuridad, para traer una palabra de esperanza a aquellos que vuelven al Señor por perdón y sanidad. Podemos estar seguros que Dios está obrando para que todo resulte para bien al final. Por lo tanto, Sofonías termina con una nota de triunfo y esperanza, a medida que el carácter compasivo y justo de Dios es revelado.
TÍTULO: Como con cada uno de los doce profetas menores, la profecía lleva el nombre de su autor, el cual generalmente se piensa que quiere decir "Jehová esconde" (2:3).
TEMAS:
Juicio. El tema central de Sofonías fue la llegada inminente del “día del Señor” (1:7, 14). Ese día será de juicio universal (1:2-3). así como del juicio específico contra Judá (1:4-6) y contra otras naciones (2:4-15). El libro enfatiza que el sincretismo religioso, el cual es una mezcla de la adoración a Dios con la idolatría (1:4-6), trae destrucción (1:9-13), pero buscar a Dios y solamente a él, con humildad, resulta en salvación )2:1-3).
La restauración. Sofonías le aseguró a su audiencia que después del juicio vendría la restauración. Dios purificará a los suyos (3:9), traería regocijo a Jerusalén (3:14-17) y restauraría tanto a su pueblo como la gloria de Jerusalén (3:18-20).
Estructura de Sofonías
Título: “El día de la ira de Jehová”
Versículo Clave: 2:3
“Buscad a Jehová todos los humildes de la tierra, los que pusisteis por obra su juicio; buscad justicia, buscad mansedumbre; quizás seréis guardados de el día del enojo de Jehová”
Época de Sofonías
Autor y fecha
Poco se conoce del autor, Sofonías. Tres otros individuos del AT comparten su nombre. Él rastrea su genealogía cuatro generaciones atrás al rey Ezequías (715-686 a.C.), permaneciendo sólo entre los profetas que descendieron de sangre real (1:1). La genealogía real le habría dado a él la información del rey de Judá; Josías, cuyo reino fue el período de tiempo durante el cual predicó Sofonías.
El profeta mismo fecha su mensaje durante el reinado de Josías (640-609 a.C.). Las condiciones morales y espirituales detalladas en el libro (1:4-6; 3:1-7) parecen colocar la profecía previa a las reformas de Josías, cuando Judá estaba aún debilitándose en idolatría e impiedad. Fue en el 628 a.C. que Josías derribó todos los altares de Baal, quemó los huesos de los falsos profetas y rompió los ídolos esculpidos (2 Cr 34:3-7); y en el 622 a.C. el Libro de la ley se encontró (2 Cr 34:8-35:19). Como consecuencia, es muy probable que Sofonías profetizó del 635-625 a.C. y fue un contemporáneo de Jeremías.
Contexto Histórico de Sofonías
Políticamente, la transferencia inminente del poder mundial asirio a los babilonios debilitó el dominio de Nínive sobre Judá, trayendo un elemento de independencia a Judá por primera vez en cincuenta años. El deseo del rey Josías por retener esta nueva libertad de los impuestos y del control extranjero sin duda alguna lo llevó a interferir más tarde con el intento de Egipto por ayudar al rey de Nínive que huía en el 609 a.C. (2 Cr 35:20-27).
Espiritualmente, los reinados del hijo de Ezequías, Manasés (695-642 a.C), extendiéndose por más de cuatro décadas; y su nieto Amón (642-640 a.C.), durante solo dos años, fueron marcados por impiedad y apostasía (2 Cr 21; 2 Cr 33). Los primeros años de reinado de Josías también fueron caracterizados por la maldad de sus padres (2 Cr 23:4). No obstante, en el 622 a.C., mientras estaban reparando la casa del Señor, Hilcías el sumo sacerdote encontró el Libro de la ley (2 Cr 22:8). Al leerlo, Josías inició reformas (2 R 23). Fue durante los primeros años del reinado de Josías, previo al gran avivamiento, que este profeta de la undécima hora, Sofonías, profetizó y sin duda alguna tuvo una influencia sobre las enormes reformas que Josías trajo a la nación. Pero los reyes malos antes de Josías (cincuenta y cinco años) habían tenido tal efecto en Judá que nunca se recuperó. Las reformas de Josías fueron llevadas a cabo demasiado tarde y no pasaron más allá de su vida.
Retos de Interpretación
El libro presenta una denuncia clara del pecado y una advertencia de juicio inminente sobre Judá. Algunos se han referido a la frase "devolveré yo a los pueblos pureza de labios" (3:9) a la restauración de un idioma universal, semejante a los días previos a la confusión de idiomas en la Torre de Babel (Gn. 11:1-9). Señalan que la palabra "labios" también es usada en Génesis 11:7. No obstante, es mejor entender el pasaje como apuntando a una purificación de corazón y vida. Esto es confirmado por el contexto (3:13) y corroborado por el hecho de que la palabra "labios" es traducida con mayor frecuencia "labio". Cuando se combina con "pureza", la referencia a conversación habla de una limpieza interna de pecado (Is. 6:5) manifestaba en conversación (Mt 12:34), que incluye quitar los nombres de dioses falsos de sus labios (Os. 2:17). No implica un idioma mundial.
Temas históricos y teológicos
El mensaje de Sofonías del día del Señor le advirtió a Judá que los días finales estaban cerca, a través del juicio divino por manos de Nabucodonosor, 605-586 a.C. (1:4-13). Sin embargo, también ve más allá de esto al cumplimiento lejano en los juicios de la septuagésima semana de Daniel (1:18; 3:8). La expresión "Día del Señor) es descrita como un día que está cerca (1:7) y como un día de ira, problema, turbación, destrucción, desolación, tiniebla, lobreguez, nubes, oscuridad intensa, trompeta y alarma (1:15, 16, 18). Sin embargo, aun dentro de estos oráculos de ira divina, el profeta exhortó al pueblo a buscar al Señor, ofreciendo un refugio en medio de juicio (2:3) y proclamando la promesa de salvación final para su remanente fiel (2:7; 3:9-20).
Vista Panorámica de Sofonías
Cuando haya manifestaciones externas de avivamiento, se debe mirar más profundo para discernir los propósitos de Dios. Al observarse más internamente se puede calcular la seriedad del pecado; es necesario que el mensaje del juicio de Dios se escuche. Sofonías predica tal mensaje al pueblo de Judá; él es el profeta del Día del Señor.
Sofonías nació durante el tiempo de Manasés, rey de Judá. Era bisnieto del rey Ezequías; por tanto, miembro de la casa real de Judá (1:1). Su nombre significa “el Señor esconde,” lo que sugiere que sus padres preocupados por su seguridad, le pusieron ese nombre como un ruego por su protección.
El reinado de Josías fue un tiempo de esplendor para el país; él fue hecho rey cuando tenía ocho años de edad. Nueve años después comenzó la primera fase de sus reformas espirituales. En el año 626 a.C. Judá fue atacado por los sanguinarios y crueles escitas, quienes llenaron de pánico el país. Cuando se encontró el libro de la ley, Josías instituyó la segunda fase de sus reformas. Sofonías ministró durante estos notables tiempos (1:1). La razón inmediata para su profecía fue la invasión escita.
Esta fue una época de cambios religiosos porque Josías había purgado al país de lo que quedaba del culto a Baal y comenzó a restablecer la adoración al Señor, erradicando prácticas y atuendos paganos. Aunque había paz y prosperidad, también había decaimiento y disolución a pesar de las reformas externas. El pueblo no deseaba aprender, los tribunales no eran más clementes, ni los profetas más fieles, ni los sacerdotes menos profanos; al contrario, la nación estaba diametralmente opuesta a Dios en cuanto a lo que Él requería.
Siendo un aristócrata, Sofonías no era un portavoz de los pobres. El ha sido llamado cruel por predicar candentes mensajes de juicio y reproche, pero ofreciendo pocas esperanzas para corregir la situación inmediata. Sofonías presenta la severidad de Dios, inculcando temor y aun terror; sin embargo, ocasionalmente él deja ver vislumbres de la ternura de Dios, inspirando esperanza en los que responden a Él.
Sofonías advierte a sus oyentes de la invasión que vendría sobre Judá y describe los pecados que están precipitándola (1:1–13). Esta invasión prefigura el futuro Día del Señor, que él describe con vívidos detalles (1:14–18). Sofonías hace un llamado al arrepentimiento y da la esperanza de que Quizás seréis protegidos el día de la ira del Señor (2:3). Luego predice el juicio sobre las naciones gentiles alrededor de Judá (2:4–15). El explora bajo la superficie de las reformas de Judá y describe la condición de los habitantes. Debido al deplorable estado moral de Israel, el cautiverio es inevitable (3:1–7). Sofonías describe un juicio futuro de los gentiles (3:8), al que le seguirá un tiempo de bendición para ellos (3:9–10) como también para Israel, cuando Cristo regrese (3:11–20).
Sofonías ofrece esperanza a todo el que busque al Señor (2:3). El cristiano no debe permitir que ninguna cosa tenga precedencia en él; Dios debe ser la principal prioridad de su vida.
Referencias Proféticas
Gran parte de las bendiciones finales sobre Sión pronunciadas en los versos 14-20, aún están por cumplirse, lo que nos lleva a concluir que estas son profecías mesiánicas que aguardan la Segunda Venida de Cristo para que se lleven a cabo. El Señor ha quitado nuestro castigo sólo a través de Cristo, quien vino a morir por los pecados de Su pueblo (Sofonías 3:15; Juan 3:16). Pero Israel aún no ha reconocido a su verdadero Salvador. Esto aún está por suceder (Romanos 11:25-27).
La promesa de paz y seguridad para Israel, un tiempo cuando su Rey esté en medio de ellos, será cumplida cuando Cristo regrese a juzgar y redimir al mundo para Él mismo. Así como Él ascendió a los cielos después de Su resurrección, así también Él regresará y establecerá una nueva Jerusalén sobre la tierra (Apocalipsis 21). En ese tiempo, todas las promesas de Dios para Israel serán cumplidas.
Importancia en la Biblia
El castigo divino que describe Sofonías surge de la santidad de Dios. Como Dios demanda santidad y justicia de su pueblo, castiga a los que permanecen en el pecado y la rebeldía (1.17). Pero el Señor también es misericordioso y fiel a su promesa. Para el remanente fiel habría protección y consuelo cuando llegaran los días negros que se aproximaban (2.1–3). Y a los justo ratifica las promesas del pacto que hizo con Abraham cientos de años atrás. Gente de todas las naciones se reunirán para adorar al Señor (2.11; 3.9). Su propio pueblo se renovará en su fidelidad (3.11–13), y el Rey de reyes reinará en medio de ellos.
Carácter de Dios en Sofonías
Dios juzga: 1:2, 3; 3:2; 3:6, 7
Dios es justo: 3:5
Dios es amoroso: 3:17
Dios se aíra: 1:14-18
Cristo en Sofonìas
Aunque Sofonìas pinta explícitamente el juicio de Dios, Cristo está presente como el "poderoso" que traerá la salvación a la tierra (3:17). Cristo mismo aludió a Sofonías (1:3, ver Mt 13:41 y 1:15, ver Mt 24:29) relacionando aún más las profecías de Sofonías con la segunda venida de Cristo.
Los 10 motivos de oración en Sofonías
Petición por arrepentimiento personal y nacional: Oremos por arrepentimiento personal y nacional en nuestras vidas y en nuestras naciones, tomando inspiración de las llamadas de Sofonías al arrepentimiento en Sofonías 2:3.
Confesión de cualquier forma de orgullo y búsqueda de humildad: Confesemos cualquier forma de orgullo en nuestras vidas y busquemos desarrollar una actitud de humildad, basándonos en las advertencias de Sofonías sobre el orgullo en Sofonías 3:11.
Petición por justicia y equidad en la sociedad: Oremos por justicia y equidad en nuestras sociedades, tomando inspiración de las exhortaciones de Sofonías a la justicia en Sofonías 3:5.
Confesión de falta de reverencia y búsqueda de temor a Dios: Confesemos cualquier falta de reverencia hacia Dios en nuestras vidas y busquemos desarrollar un temor piadoso, basándonos en las exhortaciones de Sofonías a temer al Señor en Sofonías 3:7.
Petición por compasión y misericordia hacia los necesitados: Oremos por compasión y misericordia hacia los necesitados en nuestras comunidades, tomando inspiración de las exhortaciones de Sofonías a buscar la misericordia en Sofonías 2:3.
Confesión de cualquier forma de adoración vacía y búsqueda de adoración genuina: Confesemos cualquier forma de adoración vacía en nuestras vidas y busquemos desarrollar una adoración genuina, basándonos en las advertencias de Sofonías sobre la adoración hipócrita en Sofonías 1:4-5.
Petición por protección divina en medio de las adversidades: Oremos por la protección divina en medio de las adversidades, tomando inspiración de las promesas de Sofonías de refugio en tiempos difíciles en Sofonías 3:12.
Confesión de falta de paciencia y búsqueda de paciencia: Confesemos cualquier falta de paciencia en nuestras vidas y busquemos desarrollar la paciencia, basándonos en las exhortaciones de Sofonías a ser pacientes en la espera del Señor en Sofonías 3:8.
Petición por la restauración de las relaciones fracturadas: Oremos por la restauración de las relaciones fracturadas en nuestras vidas y comunidades, tomando inspiración de las promesas de restauración de Sofonías en Sofonías 3:14-15.
Agradecimiento por la promesa de salvación y gozo en el Señor: Agradezcamos a Dios por la promesa de salvación y el gozo que proviene de confiar en Él, basándonos en las palabras de Sofonías sobre la alegría en el Señor en Sofonías 3:17.
Documentos
El pequeño libro de Sofonías habla en maneras poderosas del juicio de Dios sobre el pecado así como de su misericordioso acto de salvación de los humildes y los inmerecedores, anticipando el evangelio como es expresado en el Nuevo Testamento