Arqueología
1 Timoteo
Arqueología de 1 Timoteo
1 Timoteo 1. "La Autoridad de las Epístolas Pastorales"
Primera y segunda de Timoteo y el libro de Tito, las epístolas pastorales, declaran a Pablo como su autor (1Ti 1:1; 2Ti 1:1; Tit 1:1). Estas cartas únicas incluyen material biográfico (2Ti 1:8, 15-18), así como peticiones personales (2Ti 4:9-13, 19-21; Tit 3:12) propias de Pablo. Sin embargo, muchos estudiosos mantienen que las epístolas pastorales son pseudo epigráficas es decir, escritas falsamente en nombre de Pablo. Varios argumentos que comúnmente se plantean en defensa a este punto de vista son:
En ocasiones es difícil relacionar las acontecimientos que describen las cartas pastorales (como la obra en Creta, mencionada en Tito) con la historia del trabajo misionero de Pablo como está documentado en Hechos.
Existen evidencias en estas cartas de una estructura de la iglesia que parece haber estado demasiado desarrollada como para que estas provinieran de la época de la vida de Pablo.
Las cartas pastorales contiene un vocabulario y un estilo que no parece encajar con lo que conocemos de Pablo.
No obstante, mucha evidencia apoya el punto de vista tradicional de la auditoría paulina:
Los escritos del siglo II apoyan la creencia de que Pablo fue liberado de su primer encarcelamiento en Roma (Hch 28), lo que permitió una actividad subsecuente en Creta y Éfeso antes de su arresto final y martirio. Si este fue verdaderamente el caso, no debe ser una sorpresa que las cartas pastorales hayan tenido poco paralelos en Hechos, debido a que habrían llegado de un periodo posterior a la vida de Pablo.
Aunque las epístolas pastorales demuestran un interés significativo en los requisitos para los líderes de las iglesias, esto no demanda una estructura de la iglesia altamente desarrollada que siguiera los lineamientos de la Iglesia Católica romana posterior. Pablo aludió a los “obispos y diáconos” en sus primeros escritos (Fil 1:1), lo que invalida la presunción de que las primeras iglesias carecían de una estructura. De hecho, la primera congregación, ubicada en Jerusalén, muy pronto sintió la necesidad de una estructura más desarrollada y de varios tipos distintos de cargos dentro de la iglesia (apóstoles, diáconos, ancianos; Hch 6:1-6; 11:30). La variedad de “dones” que Pablo describió para las iglesias indica una variedad de cargos (1Co 12:28-29), y la presencia de falsos maestros en las posiciones de liderazgo en Éfeso y Creta garantizaba el enfoque de Pablo en el establecimiento de un liderazgo sano en la iglesia.
El vocabulario y el estilo de las epístolas pastorales están adecuadamente dentro del estilo de Pablo, y las variaciones pueden explicarse a la luz del contexto de estas cartas. Al escribir para encarar las falsas enseñanzas particulares (1Ti 1:4, 6-7; “Ti 2:18; Tit 1:10, 14; 3:9), Pablo se apropió con toda libertad del lenguaje de sus oponentes para sus propios propósitos. Aún más, escribió a sus colaboradores, Timoteo y Tito, dando por un hecho su familiaridad con su enseñanza, lo que le permitió prescindir de los fundamentos y enfocarse directamente en los asuntos prácticos urgentes.
La iglesia primitiva, la cual rechazó las cartas tipo seudónimo, se negó a aceptar dentro del canon aquellas cartas que falsamente afirmaban ser paulinas, y aceptó por completo las pastorales.
(Biblia de Estudio Arqueológica. Vida. p 2012)