Lectura 

Malaquías

Lectura de Malaquías

Tiempo de Lectura= 0:15 / Contiene: 4 capítulos, 55 versículos y 1.782 palabras.

Datos de Orientación de Malaquías 

Panorama del Libro de Malaquías 

    El oráculo de Malaquías viene a manera de seis disputas entre Jehová y su pueblo, teniendo todas las mismas causas básicas: en un tiempo de desilusión espiritual, Israel ha llegado a cansarse de Jehová y de guardar su pacto. Las disputas vienen en dos juegos de tres. El primer juego toma el asunto básico: su queja de que Jehová no los ama (1:2-5), y la "queja" de Jehová de ellos han mostrado menosprecio por él (1:6-2:9; 2:10-16). En el segundo juego, Jehová toma dos veces la queja de ellos de que él no ha hecho nada acerca del mal y la injusticia (2:17-3:5; 3:13-4:3), estos sostienen a Jehová exponiendo su propia forma de injusticia (3:6-12). Al mismo tiempo, ellos afirman que el gran día de Jehová vendrá (3:1-4; 3:17-4:3). El libro concluye (4:4-6) con palabras acerca de la Ley (Moisés) y los Profetas (Elías).   

Recomendaciones Específicas para la Lectura del Libro de Malaquías 

    Aunque no se puede estar seguro de cuándo profetizó Malaquías, si fue antes del tiempo de Esdras y Nehemías, como parece probable, el lector haría bien en repasar lo que se dijo acerca de esos tiempos en "Recomendaciones específicas" para la lectura de 1 y 2 Crónicas y Esdras - Nehemías. El libro de Malaquías es un indicador gráfico de la apatía moral y espiritual del tiempo, que se expresa a sí mismo en varias formas de menosprecio para Jehová y el pacto. De hecho, la mayor parte de los pecados mencionados en Malaquías son también mencionados en Esdras y Nehemías: matrimonios mixtos (Mal 2:11-15 / Esdras 9-10 / Neh 13:23-27), la falta en diezmar (Mal 3:8-10 / Neh 13:10-14), sacerdotes corruptos (Mal 1:6-2:9 / Neh 13:1-9), e injusticia social (Mal 3:5 / Neh 5:1-13).   

    Este malestar general y desdén para con el pacto probablemente explican en parte la forma singular y la estructura de Malaquías. El lector observará que cada una de las disputas tienden a seguir el mismo diseño:

    Estas disputas funcionan como un llamado a despertar en un tiempo de desengaño (3:14) cuando los que regresaron de Babilonia se sintieron generalmente abandonados por Jehová. Así, en vez del marco de una corte (como en Oseas y Miqueas, por ejemplo), Jehová  los desafía por medio de declaraciones, preguntas y explicaciones.

    Hay una clase de progresión a las disputas. Empieza con Israel cuestionando el amor de Jehová  (=compasión por ellos y lealtad a ellos). Para esto, Jehová responde que no solamente él los ama ciertamente (miren lo que le hice a Edom), sino que hay mucha evidencia de que ellos no aman a Jehová, en la forma de despreciar al pacto por parte de los sacerdotes y el pueblo por igual (ofreciendo en sacrificio animales imperfectos, divorcio, y matrimonios "mixtos"). Las tres disputas finales empiezan el círculo de nuevo. AL sentirse abandonado por Jehová, el pueblo habla cínicamente acerca de la prosperidad de los que practican la injusticia. Pero, Jehová responde, ellos mismos practican la injusticia al retener los diezmos, que es el medio de vida para los levitas y de la provisión para los pobres (Núm 18:21-32; Deut 14:28, 29). En la escena final también hay la seguridad del juicio futuro de Dios, juicio de los malvados y también salvación del (nuevo) remanente justo. 

    Así, en el final del Antiguo Testamento (por vía de la Septuaginta) hay palabras proféticas que Jesús y los escritores del Nuevo Testamento ven como que hablan acerca de su venida. Dios no solamente enviará "[su] mensajero, el cual preparará el camino delante [de él]" de modo que "vendrá a su templo el Señor a quién buscáis" (Mal 3:1), pero las dos palabras finales hablan de Moisés y de Elías, que hacen su aparición con Jesús en el monte de la Transfiguración. 

Un Recorrido por el Libro de Malaquías 

1:1

 Encabezado

   Como con el libro de Joel, el encabezado del libro de Malaquías no nos ayuda a identificar al profeta ni sus tiempos. 


 1:2-5

 Primera disputa: sobre el amor de Jehová

 Observe cómo esta primera disputa establece tanto el tono como la estructura para el resto. Jehová sí los ama. ¿En qué? Por su odio (= rechazo, aliarse ellos mismos en contra) al "hermano",pero antiguo enemigo, Edom, cumpliendo así la profecía de Abdías.         


1:6-2-9

 Segunda disputa: sobre ofrecer sacrificios inaceptables

    Ahora es el turno de Jehová. El asunto básico se establece en 1:6; los sacerdotes no aman (ellos muestran desdén) a Jehová. ¿En qué? AL ofrecer animales imperfectos a Jehová (Lev 22:17-25) que ni siquiera se atreverían a ofrecer a un gobernador. Sería mejor cerrar completamente el templo que mostrar tal lealtad (1:10-14), que también deshonra el nombre de Jehová entre las naciones. Así, esta disputa concluye con fuertes amonestaciones para que cambien sus caminos (2:1-9).


 2:10-16

 Tercera disputa: sobre matrimonios "mixtos" y el divorcio

    Observe que aquí la forma cambia ligeramente: Malaquías ahora habla por Dios (10) conforme la disputa se vuelve a la gente misma, por casarse con idólatras (11, 12), rompiendo así el pacto con Jehová (capitulación a la idolatría). El asunto del divorcio (13-16) está relacionado (romper el pacto con una esposa judía para casarse con una mujer del lugar).


 2:17-3:5

 Cuarta disputa: sobre cansar a Jehová con palabras

    Se regresa a las quejas del pueblo. En su actual malestar, ellos (cínicamente) llaman buena a la gente mala y piden justicia. La respuesta de Jehová es doble: 1) El Señor al que buscan vendrá repentinamente a su templo, como un fuego purificador (3:1-3a). 2) Su venida resultará en sacrificios aceptables en el templo (por consiguiente regresa a 1:6-2:9) y juicio contra todas formas de injusticia (3:3b-5) 


 3:6-12

 Quinta disputa: sobre el regreso de Jehová

    Esta disputa sigue muy de cerca lo que se dijo al fin de la anterior al poner de nuevo el asunto sobre la mesa, ya que ellos eran los que debían volver a Jehová (6, 7). Para su "¿En qué?", la respuesta es detener su propia forma de injusticia, la retención del diezmo (comida, que era usada para los levitas y los pobres) Solamente entonces podría ser quitada la maldición por la deslealtad al pacto, de modo que las naciones vieran de nuevo las bendiciones de Dios en su pueblo (Gén 12:3).


3:13-4:3

 Sexta disputa: sobre hablar duramente acerca de Jehová

    Esta disputa final desenvuelve el segundo juego de tres y cierra el círculo de toda la serie. Ella indica la razón por la que la primera disputa fue necesaria: el pueblo ha estado diciendo cosas duras acerca de Jehová, que es inútil servirle, y que en cualquier caso el arrogante prospera, mientras que los que se consideran justos no prosperan (3:13-15; cuarta disputa). Así la respuesta final indica que Dios efectivamente dividirá la casa - el arrogante será juzgado (4:1) - y "nacerá el Sol de justicia" para los justos (4:2, 3).   


4:4-6

 Dos palabras adicionales, la Ley y los Profetas (Moisés y Elías)

    Malaquías concluye trayendo al cuadro a Moisés (la Ley) y a Elías (los Profetas). El pueblo es alentado a guardar el pacto de la Ley, ellos pueden anticipar la venida de un segundo Elías que precederá la venida del gran día de Jehová.  


Malaquías recuerda al pueblo de Dios que deben tomar en serio su relación con el pacto y que despuntará un nuevo día para ellos con la venida de Elías (Juan el Bautista) que precederá al Señor (Jesucristo).