Levítico
Levítico
ךיקדא
"Dios santo establece el culto verdadero"
Levíticos en varias versiones:
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Tiempo de Lectura= 2:30 / Contiene: 27 capítulos, 859 versículos y 24.546 palabras.
MÉTODO CRÍTICO
1) ¿QUIÉN ESCRIBIÓ EL LIBRO? Moisés
2) ¿CUÁNDO FUE ESCRITO? 1446 - 1240 a. C.
3) ¿A QUIÉN FUE ESCRITO? A sacerdotes, Israel, al extranjero y a nosotros
4) ¿DE DONDE FUE ESCRITO? Desierto (monte Sinaí)
MÉTODO HISTÓRICO
1) ¿CUÁL ES EL TRASFONDO HISTÓRICO DEL LIBRO? Levítico y Levita se derivan de Leví, el nombre de uno de los doce hijos de Jacob. La tribu que descendió de Leví fue la tribu sacerdotal, a la cual se le encargó llevar a cabo los ritos y ceremonias de los sacrificios y la enseñanza de la ley de Moisés. El libro nos da el ritual que se usaba en los servicios del tabernáculo y describe los deberes de los sacerdotes.
El nombre del libro deriva de la Septuaginta y significa "destinado a los levitas" porque se describen las leyes sacerdotales, un manual práctico de ceremoniales religiosos. Leví fue uno de los 12 hijos de Jacob y la tribu que descendía de él tuvo a su cargo la función sacerdotal y la instrucción de la Ley de Moisés. Levíticos, sin embargo, también es el libro de la expiación, la purificación, la santidad, la adoración y el servicio. La mayor parte consiste en preceptos y estatutos establecidos por Dios para instruir a los sacerdotes levitas en sus deberes y para promover un acercamiento del pueblo hacia Dios y un estilo de vida en santidad.
MÉTODO LITERARIO
1) ¿QUÉ GÉNERO DE LITERATURA ES EL LIBRO? Instrucciones y Recomendaciones, Historia.
MÉTODO PANORÁMICO.1) ¿CUÁL ES LA IDEA PRINCIPAL DEL LIBRO? La principal idea es la santidad, conseguida por medio de la obediencia. La santidad se menciona más veces (152) que en cualquier otro libro de la Biblia.
2) ¿CUÁL FUE LA RAZÓN PRINCIPAL POR LA CUAL SE ESCRIBIÓ ESTE LIBRO? Dios quiere un pueblo apartado para Él, un pueblo santo.
PALABRAS CLAVE EN LEVÍTICOS (RV1960): Habló Jehová a Moisés diciendo, tabernáculo (tabernáculo de reunión), ley, sacrificio (ofrenda, holocausto), pecado (iniquidad), sangre, expiación, santo, pacto.
ÉNFASIS: El concepto correcto con respecto a la adoración, tanto para el pueblo como para los sacerdotes; institución del sacerdocio bajo Aarón; leyes para proteger la limpieza ritual, incluyendo expiación por los pecados (el día de Expiación); leyes para regular las relaciones sexuales, para la vida en familia, para el castigo de delitos mayores, para las fiestas y para los años especiales (sábado y jubile).
CARACTERÍSTICAS PARTICULARES: La santidad se menciona más veces (152) que en cualquier otro libro de la Biblia.
CÓMO LEER LEVÍTICO
Reglas... ¿Quién las necesita? Un vistazo rápido hacia nuestro interior y nuestro alrededor nos da una respuesta pronta y clara: ¡Nosotros! Por cientos de años, los israelitas solo conocieron la esclavitud, y Dios sabía que tenían que aprender a gobernarse a sí mismos y construir una nación. Él llevó a su pueblo al desierto para darles la claridad que necesitaban para vivir en justicia, buena salud, familias amorosas, negocios honestos, arte sano, etc. Aunque Levítico parezca un documento legal obsoleto y lleno de tradiciones desagradables, en realidad se trata de cómo mantener una relación correcta con Dios y el prójimo.
Mientras lees Levítico considera cuán importante es para Dios una vida de santidad. Presta atención a las verdades esenciales que el libro enseña sobre Dios y permite que te desafíe a caminar con mayor humildad y más cerca de tu Creador mientras escuchas su llamado: «sé santo porque yo... soy santo.» (Lev 19:2).
Descubrirás que Dios quiere que seas libre del pecado y sus efectos fatales. Encontrarás también que Él desea tener una relación personal con nosotros y quiere que seamos un pueblo santo y apartado exclusivamente para Él.
TÍTULO: El título original en hebreo de este tercer libro de la ley es tomando de la primera palabra, traducida "Y Él llamó". Varios libros del A.T derivan sus nombres hebreos de la misma manera (por ejemplo, Génesis, "En el principio"; Éxodo, "Ahora estos son los nombres"). El título "Levíticos" viene de la versión de la Vulgata latina del AT griego (LXX), Leutikon, que quiere decir "asuntos de los levitas" (25:32, 33). Mientras que el libro trata asuntos de las responsabilidades de los levitas, es mucho más significativo que todos los sacerdotes son instruidos en cómo deben asistir al pueblo en la adoración, y el pueblo es informado de cómo vivir una vida santa. Los escritos del Nuevo Testamento citan el libro de Levíticos más de quince veces.
TEMAS:
Santidad. “Sean santos, porque yo, el Señor su Dios, soy santo” (19:2) es el mensaje de este libro, En Levítico, la santidad espiritual es simbolizada por la perfección física o la pureza, así como por la separación del mundo. La pared divisoria entre la adoración judía y cristiana fue eliminada fue eliminada posteriormente por la invitación de Dios a confiar en Cristo y en su completa obra en la cruz (Gá 3:28; Ef 2:11-22), de manera que las leyes de Levítico ya no necesitaban ser cumplidas. Sin embargo, los principios morales que ellas propugnan aún se aplican hoy (Mt 5:1-7:29; 12:11-12; Mr 2:23-28).
Pecado, sacrificio, expiación. Puesto que ningún ser humano es perfecto, Dios proveyó el sistema sacrificial del Antiguo Testamento como un medio de expiación. En este sistema, se debía entregar una vida a cambio de vida. Este acuerdo temporal ya no es necesario, porque la muerte de Jesús pagó la pena por el pecado una vez y para siempre y por todas las personas (Heb 9:23-28).
Adoración. Levítico revela el deseo de Dios de estar junto a su pueblo y disfrutar el compañerismo con ellos. Mediante la adoración, el pueblo de Dios reconoce quién es él y lo que ha hecho, expresándole su amor, honor, agradecimiento y alabanza a él.
Estructura de Levítico
Título: “Seamos Santos como Dios”
Versículo Clave: 20:7,8 “Santificaos pues y sed Santos porque yo Jehová soy vuestro Dios. Y guardad mis estatutos y ponedlos por obra, yo Jehová que os santifico”
Contexto Histórico de Levítico
Antes del año en el que Israel acampó en el Monte Sinaí: 1) la presencia de la gloria de Dios nunca antes había residido formalmente entre los israelitas, 2) un lugar central de adoración, como el tabernáculo, nunca antes había existido; 3) un conjunto estructurado y determinado de sacrificios y festividades no había sido dado; y 4) un sumo sacerdote, un sacerdocio formal y un conjunto de trabajadores del tabernáculo no había sido establecidos. Al concluir Éxodo, las características uno y dos habían sido establecidas, de esta manera requirió que los elementos tres y cuatro fueran inaugurados, aquí es donde Levíticos encaja. Éxodo 19:6 llamó a Israel a ser "un reino de sacerdotes, y gente santa". Levítico es a su vez la instrucción de Dios para su pueblo que acaba de ser redimido, enseñándole cómo adorarlo y obedecerlo.
Israel tenía, hasta ese punto, solo los registros históricos de los patriarcas de los cuales obtener su conocimiento de cómo adorar y vivir delante de su Dios. Habiendo sido esclavos durante siglos en Egipto, la tierra de un aparente número infinito de dioses, su concepto de adoración y la vida piadosa fue severamente distorsionada Su tendencia a aferrarse al politeísmo y al ritual pagano se ve en su peregrinar por el desierto, por ejemplo, cuando adoraron al becerro de oro (Ex 32). Dios no les permitiría adorar de la misma manera que sus vecinos egipcios, ni tampoco toleraría ideas egipcias de la moralidad y el pecado. Con las instrucciones de Levíticos, los sacerdotes podían guiar a Israel en la adoración apropiada para el Señor.
Aunque el libro contiene una gran cantidad de ley, es presentado en un formato histórico. Inmediatamente después que Moisés supervisó la construcción del tabernáculo, Dios vino en gloria a morar allí; esto marcó el término del libro de Éxodo (40:34-38). Levíticos comienza con Dios llamando a Moisés del tabernáculo y termina con los mandamientos de Dios a Moisés en forma de legislación obligatoria. El Rey de Israel había ocupado su palacio (tabernáculo), instituido su ley y se había declarado a sí mismo un compañero de pacto con sus súbditos.
Ningún movimiento geográfico se lleva a cabo en este libro. El pueblo de Israel se queda a los pies de Sinaí, la montaña donde Dios descendió para dar su ley (25:1; 26:46; 27:34). Aún estaban allí un mes después cuando el registro de Números comenzó (Nm 11).
Autor y fecha
Asuntos de autor y fecha son resueltos por el versículo de conclusión del libro: "Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de Israel, en el monte de Sinaí" (27:34; 7:38; 25:1; 26:46). El hecho de que Dios dio estas leyes a Moisés (1:1) aparece cincuenta y seis veces en los veintisiete capítulos de Levíticos. Además de registrar prescripciones detalladas, el libro relata varios relatos históricos que se relacionan con las leyes (8-10; 24:10-23). El éxodo ocurrió en el 1445 a.C. y el tabernáculo fue terminado un año más tarde (Éx 40:17). Levíticos retoma el registro en ese punto, probablemente revelado en el primer mes (Abib / Nisán) del segundo año después del éxodo. El libro de Números comienza después de esto en el segundo mes (Ziv; Nm 1:1).
Retos de Interpretación
Levíticos es tanto un manual para la adoración de Dios en Israel como una teología del ritual del antiguo pacto. Un entendimiento claro de las ceremonias, leyes y detalles de ritual prescritas en el libro es difícil de poseer hoy día debido a que Moisés asumió cierto contexto de entendimiento histórico. Una vez que el reto de entender las prescripciones detalladas ha sido enfrentado, la pregunta emerge en cuanto a cómo los creyentes en la iglesia deben responder a ellas, debido a que el NT claramente abroga la ley ceremonial del AT (cp. Hch. 10:1-16; Col. 2:16, 17), el sacerdocio levítico (cp. 1 P. 2:9; Ap. 1:6; 5:10; 20:6) y el santuario (cp. Mt. 27:51), como también instituye el nuevo pacto (cp. Mt. 26:28; 2 Co. 3:6-18; He.7-10). En lugar de tratar de practicar las ceremonias antiguas o buscar algún significado espiritual más profundo en ellas el enfoque debe estar en la identidad santa y divina detrás de ellas. Esta puede ser en parte la razón por la que las explicaciones que Moisés frecuentemente dio en las prescripciones para la limpieza ofrecen un mayor entendimiento de la mente de Dios que lo que las ceremonias mismas ofrecen. Los principios espirituales en los que los rituales estaban arraigados son permanentes porque están arraigados en la naturaleza de Dios. El NT afirma claramente que desde Pentecostés en adelante (cp. Hch 2), la iglesia está bajo la autoridad del nuevo pacto, no del antiguo (He. 7-10).
El intérprete es animado a comparar características de este libro con escritos del NT que presentan tipos o analogías basadas en el tabernáculo y los aspectos ceremoniales de la ley, con objeto de enseñar lecciones de valor acerca de Cristo y la realidad del nuevo pacto. Aunque la ley ceremonial sólo servía como una sombra de la realidad de Cristo y su obra redentora (He. 10:1), la tipología excesiva debe ser rechazada. Solo aquello que los escritores del NT identifican como tipos de Cristo debe ser designado de esa manera (cp.1 Co 5:7:"Cristo es nuestra Pascua").
El estudio más provechoso de Levíticos es aquel que presenta la verdad en el entendimiento del pecado, la culpabilidad, la muerte sustitutiva, y la expiación al enfocarse en características que no son explicadas o ilustradas en otros lugares en las Escrituras del AT. Más adelante, autores del AT, y especialmente del NT, edificaron sobre el entendimiento básico de estos asuntos provistos en Levíticos. Las características sacrificiales de Levíticos apuntan a su cumplimiento definitivo y único en la muerte sustitutiva de Jesucristo (He. 9:11-22).
Temas históricos y teológico
Las ideas clave alrededor de las cuales Levíticos se desarrolla son la persona santa de Dios y la voluntad de Dios para la santidad de Israel. La santidad de Dios. la pecaminosidad de la humanidad. el sacrificio y la presencia de Dios en el santuario son los temas más comunes del libro. Con un tono claro, de autoridad, el libro establece instrucciones hacia la santidad personal conforme a la instrucción de Dios (11:44. 45; 19:2; 20:7, 26; cp. 1P. 1:14-16). Asuntos que tienen que ver con la vida de fe de Israel tienden a enfocarse en la pureza en contextos de ritual, pero no a expensas de preocupaciones que tiene que ver con la pureza personal de Israel. De hecho, hay énfasis continuo en la santidad personal en respuesta a la santidad de Dios (compárese este énfasis en los capítulos 17-27). En más de 125 ocasiones, Levíticos condena a la humanidad por inmundicia y la instruye a cómo ser purificada. El motivo para tal santidad es afirmado en dos frases repetidas: "Yo soy Jehová" y "Yo soy Santo". Estas son usadas más de 50 veces.
El tema del pacto mosaico condicional emerge a la superficie a lo largo del libro, pero particularmente en el capítulo 26. Este contrato para la nueva nación no sólo detalla las consecuencias de la obediencia o la desobediencia a las estipulaciones del pacto, sino que lo hace de una manera establecida para determinar la historia de Israel. Uno no puede evitar reconocer implicaciones proféticas en los castigos por la desobediencia; suena como los acontecimientos de la deportación de Babilonia que se lleva a cabo mucho más tarde, y el regreso subsiguiente a la tierra casi 900 años después de que Moisés escribió Levíticos (538 a.C.). Las implicaciones escatológicas de la desobediencia de Israel no concluirán sino hasta que el Mesías venga a introducir su reino y dar fin a las maldiciones de Lv. 26 y Dt. 28 (comparece con Zac. 14:11)
Los cinco sacrificios y ofrendas eran simbólicos. Su diseño consistía en permitir que el adorador verdaderamente penitente y agradecido expresara fe y amor hacia Dios al llevar a cabo estos rituales. Cuando el corazón no era penitente y no estaba agradecido, Dios no se agradaba del ritual. (compárese con Amós 5:21-27. Las ofrendas eran quemadas, simbolizando el deseo del adorador por ser limpiado del pecador enviar humo fragante de la verdadera adoración a Dios. La multitud de pequeños detalles en la ejecución de los rituales consistía en enseñar exactitud y precisión que se extendería a la manera en la que el pueblo obedecía las leyes morales y espirituales de Dios y la manera en la que reverenciaban cada faceta de su palabra.
Vista Panorámica de Levítico
En hebreo el nombre para Levítico es “wa-yiqra” (que significa “y [él] llamó”), la cual es la primera palabra del libro. El título “Levítico” proviene del griego y quiere decir “perteneciente a Leví.” Este libro contiene las instrucciones dadas directamente por Dios a Moisés, el autor del libro (1:1).
Un escritor comentó: “En Éxodo vemos cómo Dios saca a su pueblo de Egipto. En Levítico vemos cómo Dios saca a "Egipto de su pueblo.” Debido a su prolongada estancia allí, Israel fue afectado por la cultura egipcia. Para contrarrestar esa influencia, Dios le dio a Moisés el libro de Levítico para proporcionar las normas para cada etapa de la vida de Israel. Mientras que en Éxodo la ley moral había sido dada desde la majestuosidad del monte Sinaí, la ley ceremonial en Levítico fue proclamada desde el Tabernáculo.
El modelo divino del libro de Levítico no está limitado a la vida religiosa de Israel. Todos los aspectos de la vida de los israelitas estarían dirigidos por Dios. Levítico constantemente enfatiza la santidad de Dios y la necesidad del hombre de responder con santidad en cada aspecto de su vida diaria.
En los sacrificios y ofrendas, Dios le daba a los israelitas la oportunidad de expresar varios aspectos de la adoración: La ofrenda encendida expresaba completa consagración a Dios; la ofrenda de cereal simbolizaba la mayordomía de los esfuerzos de la persona; la ofrenda de paz proyectaba la comunión entre Dios y el hombre y entre el pueblo y los sacerdotes; la ofrenda por el pecado acentuaba el derramamiento de sangre, sobre todo mostraba el sacrificio de una vida inocente en substitución por el adorador; la ofrenda por la culpa mostraba que era necesario hacer restitución cuando alguien ofendiera a Dios o a otra persona.
En las leyes sobre lo limpio y lo inmundo, Dios le hacía ver a Israel que sus vidas habrían de estar reguladas por normas absolutas. Los días de santa convocación eran memoriales históricos que a la vez demostraban verdades acerca de Dios: El día de reposo era un recordatorio para ellos de que Dios es el Creador; la Pascua, de que Dios es el Redentor; las fiestas de Pentecostés y de los Tabernáculos tenían significado agrícola y mostraban a Dios como el proveedor; el Día de Expiación representaba a Dios como santo y requiriendo santidad de parte de su pueblo. También lo mostraba como lleno de gracia, dándole oportunidad al hombre para reconciliarse con El.
El libro de Levítico enfatiza que los israelitas redimidos deberían ser santos. Con frecuencia Dios les dice: “Sed santos; porque yo soy santo” (Levítico 11:44, 45; 19:2; 20:7, 26; 21:6, 8). Este libro puede considerarse como el manual de la santidad de Dios donde se describe la conducta de un corazón a tono con El. Para el cristiano, la santidad personal es producida por el Espíritu, pero debe ser mostrada exteriormente (Col. 3:12–13).
Referencias Proféticas
Muchas de las prácticas en los rituales de adoración, ilustran de muchas formas la persona y la obra de nuestro Salvador, el Señor Jesucristo. Hebreos 10 nos dice que la Ley Mosaica era “sólo una sombra de los bienes venideros” por lo que significa que los diarios sacrificios ofrecidos por los sacerdotes por los pecados del pueblo, eran una representación del Sacrificio absoluto – Jesucristo, cuyo sacrificio fue hecho una vez y para siempre por aquellos que creyeran en Él. La santidad impartida temporalmente por la Ley, un día sería reemplazada por la obtención de la santidad absoluta cuando los cristianos cambian su pecado por la justicia de Cristo (2 Corintios 5:21).
Importancia en la Biblia
Levítico es importante por sus claras enseñanzas en cuanto a tres verdades espirituales fundamentales:
→ EXPIACIÓN, → SACRIFICIO y → SANTIDAD
Expiación
El capítulo 16 de Levítico contiene las instrucciones de Dios para la observación del Día de Expiación. En ese día el sumo sacerdote de Israel entraba al Lugar Santísimo y ofrecía un sacrificio animal en expiación por sus propios pecados. Después mataba otro animal y rociaba la sangre sobre el altar para expiar el pecado del pueblo. El Nuevo Testamento compararía después estos sacrificios al sacrificio de Cristo al morir en nuestro lugar. Pero a diferencia de los sacerdotes humanos, Cristo no tuvo que ofrecer primero un sacrificio por sus propios pecados y luego por los del pueblo, porque esto lo hizo cuando se presentó a sí mismo como sacrificio (Heb 7.27).
Sacrificio
Levítico enseñó a Israel a preparar diferentes tipos de sacrificios: ofrenda encendida, ofrendas de grano, ofrendas de paz, ofrendas por el pecado y ofrendas por culpa y transgresión. Eran presentes por medio de los cuales un adorador expresaba su lealtad y devoción a Dios. Pero un sacrificio cruento en el que se presentaba a Dios la sangre de un animal era más que un regalo. Simbolizaba que el adorador ofrecía su vida a Dios, pues los hebreos creían que «la vida de la carne en la sangre está» (Lv 17.11). Esto también adquiere mayor significado en el Nuevo Testamento cuando se aplica a Cristo. Él dio su vida a nuestro favor cuando derramó su sangre para quitar nuestro pecado.
Santidad
El significado esencial de esta palabra en Levítico es que Dios demanda absoluta obediencia de su pueblo. La palabra en esencia quiere decir «separación». El pueblo de Dios tenía que separarse y ser diferente de los pueblos paganos que los rodeaban, y de ahí la razón por la que Dios instruyó a su pueblo que no comiera ciertos alimentos que no consideraba limpios. Solo un pueblo limpio e incontaminado podría Él usar para cumplir su propósito de redención del mundo. Levítico deja también bien claro que la santidad que Dios demandaba incluía la conducta diaria de su pueblo. De estos se esperaba que practicaran la bondad, la honradez y la justicia, y que se mostrará compasión hacia el pobre (Lv 19.9–18).
Carácter de Dios en Levítico
Dios es accesible: 16:12-15
Dios es glorioso: 9:6, 23
Dios es santo: 11:44-45
Dios es aira: 10:2
Cristo en Levítico
Los sacrificios específicos (por ejemplo, cap. 16) descritos en Levíticos sugieren los múltiples aspectos del sacrificio expiatorio de Cristo. Los capítulos sobre el sacerdocio (21-22) prefiguran la perfección de Cristo como máximo sumo sacerdote.
Las claras instrucciones de Dios sobre las ofrendas en el libro de Levíticos apuntan al sacrificio propiciatorio final de Cristo. Como los sacrificios del pueblo representaban solo la expiación temporal de los pecados de Israel, tenían que repetirlos de tiempo en tiempo. Jesús llevó una vida perfecta en la tierra y se presentó como sacrificio final y definitivo por toda la humanidad.
En contraste con la fiesta de la Pascua del AT, que se celebraba todos los años, los creyentes constantemente celebramos la "fiesta" de la nueva Pascua: Jesucristo, el cordero pascual (1Co 5:7)
Los 10 motivos de oración de Levítico
Agradecimiento por la provisión del sacrificio de Jesús: Oremos agradeciendo a Dios por proveer un sistema de sacrificios que permitía la reconciliación con Él ejemplificado en Jesucristo (Levítico 1:1-17).
Arrepentimiento y búsqueda de purificación: Pidamos perdón y busquemos la purificación en nuestras vidas, reconociendo la importancia de la pureza en los rituales descritos en Levítico comparándolos con nuestra vida (Levítico 11:44-45).
Petición por una reverencia profunda: Oremos para cultivar una reverencia profunda hacia Dios, inspirados por la solemnidad de los rituales y la presencia divina en el Tabernáculo, como el entrar en su presencia. (Levítico 16:1-34).
Agradecimiento por la santidad de Dios: Agradezcamos a Dios por su santidad y busquemos reflejar esa santidad en nuestras vidas diarias (Levítico 19:1-2).
Petición por obediencia a los mandamientos: Oremos por la gracia y la fortaleza para obedecer los mandamientos dados en Levítico, buscando vivir vidas santas y justas (Levítico 20:7-8).
Confesión de pecados de omisión: Confesemos los pecados de omisión, reconociendo la importancia de cumplir con los mandamientos y no descuidar las responsabilidades espirituales (Levítico 5:17-19).
Petición por la gracia redentora: Pidamos la gracia redentora de Dios en nuestras vidas, recordando las disposiciones para el Año del Jubileo y la liberación de deudas (Levítico 25:8-17).
Intercesión por la comunidad: Intercedamos por la comunidad, pidiendo a Dios que nos una y nos guíe como su pueblo, tal como se describe en las leyes comunitarias de Levítico (Levítico 19:9-18).
Petición por sanidad física y espiritual: Oremos por la sanidad física y espiritual, recordando cómo la ley incluye disposiciones para la limpieza de enfermedades y la restauración de los enfermos (Levítico 13:1-59; 14:1-57).
Agradecimiento por la reconciliación a través de Cristo: Agradezcamos a Dios por la obra redentora de Cristo, reconociendo que Él es nuestro sumo sacerdote perfecto y el sacrificio completo que nos reconcilia con Dios (Hebreos 9:11-14).
Documentos
Levíticos es la parte de la historia de Dios en la que los Israelitas reciben instrucciones sobre cómo ser santos, cómo ser verdaderamente aceptables a Dios y cómo estar en buena relación unos con otros, lo que no podrían lograr sin su provisión especial.