Estudio
Jeremías
Estudio de Jeremías
Estudio Inductivo de Jeremías
Capítulo 1: Hacia la comprensión del mensaje de Jeremías.
Para comprender el mensaje de Jeremías, le hace falta comprender primero el llamamiento y la comisión que él recibió del Señor. Así que familiarícese del todo con el capítulo 1 antes de leer las instrucciones generales para los capítulos 2 al 38.
1. Lea el capítulo pidiéndole a Dios que lo ilumine y le dé entendimiento. Lea luego el capítulo una vez más, a fin de profundizarse en todo su contenido.
2. Los primeros tres versículos presentan el marco histórico de Jeremías.
A la luz de estos versículos, estudie el diagrama Época de Jeremías. “La cautividad de Jerusalén” (1:3) se refiere al sitio final y a la destrucción de Jerusalén en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia en el año 586 a.C.
En el libro de Jeremías se encuentran muchas referencias al tiempo en que ocurren los hechos, como es el caso de 1:1-3. Al encontrar esa clase de información, consulte el diagrama de la época de Jeremías para ver quién era rey en ese tiempo, y qué relación había entre él y los demás reyes. Jeremías no sigue un orden necesariamente cronológico, por lo que tal información le ayudará a tener una perspectiva adecuada del tiempo en que suceden los hechos. Marque de manera distintiva toda referencia al tiempo.
Llene los espacios en blanco para “Autor” y “Fecha” en Capítulos de Jeremías.
3. Vuelva a leer Jeremías 1, haciéndose las seis preguntas ya conocidas. Por ejemplo: ¿Quién era Jeremías? ¿Qué se esperaba que Jeremías fuera, o hiciera? ¿A quién fue enviado, y quién lo envió? ¿Cuándo fue llamado, y por qué? ¿Cuál fue su respuesta? ¿Cómo habría de llevar a cabo su comisión? ¿Qué tenía que decir? ¿Cuál sería la reacción de la gente? ¿Qué tenía que hacer Jeremías? ¿Qué pasaría si la gente no respondía de manera positiva? ¿Qué haría Dios al respecto?
En una hoja aparte, apunte las posibles respuestas a esas preguntas y cualesquiera otras que surjan de la lectura del texto. No introduzca en el texto ninguna idea particular, sino deje que el texto hable por sí mismo.
Elabore en el margen del capítulo 1 una lista de todo lo que aprenda acerca del profeta jeremías, así como de su llamamiento y de los pormenores de su comisión. Anote, a la luz de las seis preguntas típicas, todas las observaciones que surjan del estudio de este capítulo. Sea específico. Lea el capítulo varias veces más.
4. Anote el tema de este capítulo en Capítulos de Jeremías.
5. El resto del libro gira en torno al llamamiento y comisión de Jeremías. Todo lo que Jeremías dice y hace tiene sus raíces en el capítulo 1. ¡Tenga presente lo anterior durante su estudio del libro!
El mensaje crítico y apasionado de Jeremías contiene discursos y relatos de acontecimientos en la vida de Jeremías, y en la historia de Israel, Judá y las demás naciones.
Capítulos 2-38: El pecado de Judá y el llamado de Dios a la conversión
Lea todas las instrucciones antes de comenzar. Refresque la memoria de cuando en cuando, ya que Jeremías es un libro bastante extenso.
1. Estudie esta sección capitulo por capitulo, y haga lo siguiente:
Cuando Jeremías hablaba, tenía que hacer dos cosas, la una negativa y la otra positiva, en ese orden. En primer lugar, tenía que arrancar, destruir, arruinar y derribar. En segundo lugar, tenía que edificar y plantar. Conforme vaya leyendo, observe cómo cumple Jeremías con estas dos comisiones con relación a Judá.
Elabore en el margen una lista de los pecados de Judá, de la “maldad” (1:16) que Dios tenía que corregir arrancando, destruyendo, arruinado y derribando.
Observe también toda promesa de edificar y de plantar, es decir, de restaurar. Anote en el margen lo que Dios haría a favor de ellos, cuándo lo haría, y por qué.
Jeremías tenía la seguridad de que Dios cumpliría su palabra (1:12). Conforme vaya leyendo, anote en el margen la sentencia que Dios dictó contra Judá.
Tome nota de la manera en que Dios ejecuta la sentencia. En varias ocasiones Dios ordenó a Jeremías realizar algunos actos simbólicos, a fin de que el pueblo entendiera claramente su mensaje. No pierda de vista tales dramatizaciones.
Esté atento a los textos en los que se muestra a Dios realizando o cumpliendo lo que había prometido llevar a cabo. Tome nota de lo que Dios debe hacer en razón del pacto (la ley) que hizo con ellos.
En el margen señale con algún símbolo toda referencia al tiempo.
2. Jeremías recibió la orden de comunicar todo lo que Dios le mandara decir. De antemano supo que tendría que enfrentarse a reyes, príncipes y sacerdotes, y de pueblo en general.
Anote en el margen toda oposición que haya enfrentado Jeremías. Tal vez quiera poner esas anotaciones bajo el título “Oposición”. Siga atentamente las luchas de Jeremías, y la manera en que las encaró. Observe también cómo libra Dios a Jeremías conforme a sus promesas en 1:8, 18-19. (Se describe el punto máximo del sufrimiento físico de Jeremías en los capítulos 37 y 38.)
Tome nota de lo que aprenda acerca de los dirigentes, los pastores (espirituales) y los profetas.
3. En el capítulo 21 aparece en escena Nabucodonosor, rey de Babilonia, pues “del norte se soltará el mal sobre todos los moradores de esta tierra” (1:14). A partir de este punto cobran importancia Babilonia y Nabucodonosor. Tal vez quiera resumir en el margen, bajo el título “Babilonia”, lo que aprenda sobre esa nación y sobre su rey.
4. Se repiten muchas de las palabras clave. La siguiente lista es sólo una sugerencia en cuanto a qué palabras marcar, de modo que usted pueda omitir algunas de ellas a añadir otras. Este ejercicio es muy provechoso, siempre y cuando reflexiones en lo que estas palabras traen al texto y en lo que le enseñan a usted.
Marque cada caso en que ocurra nación o naciones, observando de qué nación se trata, y anotando en el margen lo que aprenda de cada una.
Preste atención a los verbos arrancar (sacar de raíz), destruir, derribar, edificar, plantar y restaurar – y a sus sinónimos -; y márquelos de manera distintiva o subráyelos en el texto.
Tal vez quiera marcar de manera distintiva también las siguientes palabras y sus sinónimos, a fin de localizarlas fácilmente en el texto: escuchar (oír), volver (volverse, convertirse, arrepentirse), ramera, adulterio (s), maldad (malvado, iniquidad, pecado), corazón, abandonar, sanar (sanidad) y pacto. Escríbalas en una tarjeta que sirva como marcador de libro, usando para cada palabra un color o símbolo específico.
5. Después de estudiar cada capítulo, marcar las palabras clave y hacer anotaciones en el margen, anote los temas de estos capítulos en Capítulos de Jeremías.
Capítulos 39-45: Caída de Jerusalén u destierro de Judá.
1. Esta sección es mayormente narrativa, con la excepción del capítulo 45. Por lo tanto, al leer cada capítulo haga lo siguiente.
Tome nota de lo que sucede, cuándo sucede (señale las referencias al tiempo), dónde y por qué sucede.
Tome nota de quién o quiénes intervienen, marcando de manera distintiva los personajes principales de cada capítulo. Anote luego en el margen quiénes son, y agregue cualquier dato de importancia que quiera recordar.
Marque la palabra oír y otras que sobresalgan en cada capítulo.
2. Anote los temas de los capítulos, como ha hecho con anterioridad.
Capítulos 46-51: Profecía de Jeremías acerca de las naciones.
1. En el curso de la lectura, tome nota de las palabras del Señor en cuanto a lo que va a suceder, y por qué va a suceder. Tome nota igualmente del resultado final y de alguna esperanza futura, si es que el Señor lada. Observe y marque toda referencia al tiempo.
2. Marque estas palabras y frases clave: acerca de, naciones, Medio y norte. Tome nota de lo que aprenda acerca de Israel en estos capítulos.
3. La información que estos capítulos contienen acerca de Babilonia es de suma importancia, y le servirá de mucho cuando estudié la profecía bíblica o el libro de Apocalipsis. Anote en el margen todo lo que aprenda acerca de Babilonia.
Capítulo 52: Últimos días del exilio de Judá.
1. Al estudiar este capítulo, marque las referencias al tiempo y note en el margen lo que se hizo con los reyes, l ciudad y los utensilios del templo, y quién lo hizo.
2. Anote el tema de este capítulo en Capítulos de Jeremías. Llene el resto, sin dejar de anotar, bajo la división por secciones, cada sección de Jeremías.
Hojas de trabajo de Jeremías
12 Métodos de Estudio Bíblico
Estos son los 12 métodos de estudios bíblicos que lo capacitarán para que estudie la Biblia por sí mismo. Se presentan en orden de simplicidad y uso de las obras de consulta, empezando con las más fáciles y siguiendo con las más difíciles.
l. Método devocional. Seleccione una breve porción de su Biblia y en oración medite en ella hasta que el Espíritu Santo le manifieste la manera en que puede aplicar la verdad que le mostró en su propia vida. Escriba una aplicación personal. Detalles - Ejemplo - Formulario
2. Método del resumen de un capítulo. Lea un capítulo de la Biblia por lo menos cinco veces: luego escriba un resumen de la idea central que haya encontrado. Detalles - Ejemplo - Formulario
3. Método de cualidades del carácter. Escoja una cualidad de carácter que le gustaría adquirir para su propia vida y estudie lo que la Biblia dice al respecto. Detalles - Ejemplo - Formulario
4. Método temático. Elija un tema bíblico. Después piense en tres o cinco preguntas de las que le gustaría tener una respuesta. A continuación estudie todas las referencias bíblicas al tema que pueda encontrar y escriba las que contesten las preguntas que había elaborado. Detalles - Ejemplo - Formulario
5. Método biográfico. Seleccione un personaje bíblico e investigue todos los versículos que se relacionan con esa persona con el fin de estudiar su vida y características. Tome nota de sus actitudes, puntos fuertes y débiles. Después aplique en su propia vida lo que haya aprendido. Detalles - Ejemplo - Formulario
6. Método de tópicos. Reúna y compare todos los versículos que encuentre sobre un tema en particular. Organice sus conclusiones en un bosquejo que le permita compartir el estudio con otras personas. Detalles - Ejemplo - Formulario
7. Método de estudio de palabras. Estudie las palabras importantes de la Biblia. Investigue cuántas veces se menciona una palabra en las Escrituras y cómo se usa. Investigue el significado original de la palabra. Detalles - Ejemplo - Formulario
8. Método de trasfondo de un libro. Estudie lo relacionado con la historia, geografía, cultura, ciencia y problemas políticos en los tiempos bíblicos. Use libros de referencia bíblicos para aumentar su comprensión de la Palabra.
Detalles - Ejemplo - Formulario
9. Método de estudio de un libro. Estudie todo un libro de la Biblia leyéndolo varias veces hasta obtener un panorama general del mismo. Estudie el trasfondo del libro y tomé notas de su contenido. Detalles - Ejemplo - Formulario
10. Método de análisis de capítulos. Domine el contenido de los capítulos de un libro de la Biblia echándole un vistazo en profundidad a cada uno de los versículos del capítulo. Desglose cada versículo palabra por palabra para poder observar cada detalle. Detalles - Ejemplo - Formulario
11. Método de síntesis del libro.Resuma los contenidos y los temas principales de un libro de la Biblia después de haberlo leído varias veces. Haga un bosquejo del libro. Este método se lleva a la práctica después de haber realizado el método de estudio del libro y el método de análisis de capítulos de cada capítulo de ese libro. Detalles - Ejemplo - Formulario
12. Método de análisis versículo por versículo. Este método selecciona un pasaje de las Escrituras y lo examina con lujo de detalles mediante preguntas, descubriendo referencias cruzadas y parafraseando cada versículo. Se escribe una posible aplicación de cada uno de los versículos que se estudiaron. Detalles - Ejemplo - Formulario
Gobernantes y Profetas de la época de Jeremías
Examen de Jeremías
Principales Doctrinas en Jeremías
Pecado: el pecado de Israel exigía que Dios les castigará (2.1–13, 23–37; 5.1–6; 7.16–34; 11.1–17; 17.1–4; 18.1–17; 23.9–40; Éx 23.33; Dt 9.16; 1 R 11.39; Esd 6.17; Job 1.22; Sal 5.4; Mi 3.8; Mt 5.30; Lc 17.1; Ro 1.29).
Juicio y castigo (4.3–18; 9.3–26; 12.14–17; 15.1–9; 16.5–13; 19.1–15; 24.8–10; 25.1–38; 39.1–10; 44.1–30; 46.1—51.14; Éx 12.12; Sal 1.5; Os 5.1; Am 4.12; Jn 12.31, 32; Ro 14.10; 2 Ts 1.7–10).
Restauración de Israel (23.3–8; 30—33; Dt 30.1–5; Sal 71.20, 21; Is 49.6; Nah 2.2; Hch 1.6–8; 15.16; 1 P 5.10).
Malas interpretaciones de Jeremías
El libro de Jeremías en la Biblia es una obra profética que contiene mensajes de Dios para su pueblo. Sin embargo, como cualquier texto, puede ser malinterpretado o mal utilizado. A continuación, se presentan algunas malas interpretaciones comunes de Jeremías:
1. Ignorar el contexto histórico de Jeremías: El libro de Jeremías fue escrito en un contexto histórico específico y es importante tener en cuenta este contexto para entender su mensaje. Ignorar el contexto histórico puede llevar a malentendidos o interpretaciones erróneas del mensaje de Jeremías.
2. Tomar Jeremías fuera de contexto: A veces, se toma un versículo o un pasaje de Jeremías fuera de su contexto original para apoyar una idea o interpretación particular. Es importante leer Jeremías en su totalidad y tener en cuenta el contexto de los pasajes individuales para comprender su mensaje completo.
3. Utilizar Jeremías para justificar la violencia o la opresión: Jeremías contiene mensajes de juicio y condena, pero estos no deben ser utilizados para justificar la violencia o la opresión. Es importante recordar que el mensaje de Jeremías se basa en el amor y la justicia de Dios, y cualquier interpretación que vaya en contra de estos valores fundamentales es una malinterpretación del mensaje de Jeremías.
4. Interpretar Jeremías solo como un libro de profecías sobre el futuro: Aunque el libro de Jeremías contiene profecías sobre el futuro, también habla sobre temas importantes como la justicia social, la fidelidad a Dios y la necesidad de arrepentimiento. Interpretar Jeremías solo como un libro de profecías sobre el futuro puede llevar a una comprensión incompleta de su mensaje.
En resumen, el libro de Jeremías es una obra profética que contiene mensajes importantes sobre la justicia social, la fidelidad a Dios y la necesidad de arrepentimiento. Es importante tener en cuenta su contexto histórico, leerlo en su totalidad y no tomar versículos o pasajes fuera de contexto. Además, cualquier interpretación que vaya en contra de los valores fundamentales del amor y la justicia de Dios es una malinterpretación del mensaje de Jeremías.