Aplicación
1 Juan
Aplicación de 1 Juan
Aplicación de 1 Juan
1. Según los criterios establecidos en esta carta, ¿cómo puede saber usted si tiene o no la vida eterna?
2. ¿Qué ha aprendido de esta carta en cuanto al pecado? ¿Practica usted la justicia o el pecado?
3. ¿Ama lo que hay en el mundo? ¿Se halla atrapado en la vanagloria de la vida y en los deseos de los ojos?
4. Según 1 Juan 3, ¿qué debe hacer cuando su corazón lo reprende o condena?
5. Lo que cree usted acerca de Jesucristo, ¿corresponde con lo que 1 Juan enseña acerca de Él?
Aplicación final de 1 Juan
1. ¿Cuáles son las verdades básicas de 1 Juan?
2. ¿Cómo se aplican estas verdades a mi vida?
3. ¿En vista de estas verdades, qué cambios deberían hacer en mi vida?.
4. ¿Cómo pienso llevar a cabo estos cambios?
5. ¿Cuál será mi oración personal referente a esta verdad, y los cambios que debería efectuar en mi vida?
Aplicación práctica
El libro de 1 Juan es un libro de amor y gozo. Explica el compañerismo que tenemos unos con otros y con Jesucristo. Hace la diferencia entre la felicidad, la cual es temporal y efímera, y el gozo verdadero, respecto al cual 1 Juan nos dice cómo alcanzarlo. Si tomamos las palabras escritas por Juan y las aplicamos a nuestras vidas diarias, el amor verdadero, el compromiso, el compañerismo y el gozo que anhelamos, será nuestro.
El apóstol Juan conocía bien a Cristo. Él nos dice que todos podemos tener también esa estrecha relación con Jesucristo. Tenemos el testimonio de hombres que tuvieron un contacto directo y personal con Él. Los escritores de los Evangelios presentan su testimonio sólidamente estructurado sobre una realidad histórica. Ahora, ¿cómo se aplica eso a nuestras vidas? Se nos explica que Jesús vino aquí como el Hijo de Dios, para crear una unión con nosotros basada en Su gracia, misericordia, amor y aceptación. Son tantas las veces que la gente piensa que Jesús está lejos, en algún lugar lejano y que Él realmente no se preocupa por nuestras luchas diarias, problemas y preocupaciones.
Pero Juan nos está diciendo que Jesús está justo aquí con nosotros, tanto en los asuntos simples y mundanos de nuestras vidas, como en los complejos sufrimientos del alma. Juan da testimonio como testigo basado en sus experiencias personales, que Dios se hizo carne y habitó entre los hombres. Eso significa que Cristo vino a vivir con nosotros y Él aún vive con nosotros. Así como caminó por el mundo al lado de Juan, así también camina a través de cada día con nosotros. Necesitamos aplicar esta verdad en nuestras vidas y vivir como si Jesús estuviera parado justo a nuestro lado cada segundo del día. Si ponemos esta verdad en práctica, Cristo añadirá santidad a nuestras vidas, haciéndonos más y más semejantes a Él.